La policía tanzana ha matado a 65 personas y lesionado a 270 durante años de enfrentamientos esporádicos con aldeanos en una controvertida mina de oro de propiedad de la canadiense Barrick Gold, según evidencia escuchada por una investigación del gobierno tanzano.
Fuente: The Globe and Mail
El supuesto número de muertes, basado en quejas presentadas a la investigación por las comunidades locales, es la primera estimación oficial de la escala de violencia denunciada en la mina de oro de North Mara, operada por la filial africana de Barrick Gold Corp.
La compañía con sede en Toronto ha sido criticada durante muchos años por el gran número de muertes violentas en la mina de Tanzania, la cual tiene acuerdos con la policía local para proporcionar seguridad. Los aldeanos entran rutinariamente en el sitio en busca de roca de bajo grado, de la cual pueden extraer pequeños trozos de oro. A menudo chocan con la policía, a la que se acusa de prohibir el acceso a algunos aldeanos mientras aceptan sobornos de otros para permitirles entrar.
La filial mayoritaria de Barrick, anteriormente conocida como African Barrick Gold y ahora conocida como Acacia Mining, tiene su sede en Londres. Opera tres minas de oro importantes en Tanzania.
En julio, en sus resultados provisionales para el primer semestre de este año, Acacia reveló que el Ministro de Minas de Tanzania había designado una comisión para investigar las disputas entre la mina de North Mara y las comunidades locales.
La compañía minera elogió el informe de la comisión, que fue mostrado a las comunidades locales cerca de North Mara. La compañía lo llamó “un resultado justo para todas las partes interesadas”, pero no mencionó el número de muertes y lesiones que fueron citadas en el informe.
En el informe en idioma swahili, obtenido por The Globe and Mail, la comisión dijo que había recibido denuncias de 335 casos de abuso por parte de la policía tanzana, incluyendo 65 muertos y 270 heridos. Las quejas fueron entregadas a la comisión en febrero y marzo, cuando visitó la remota región donde se encuentra la mina.
El informe no dio el período de tiempo para estas muertes y lesiones, pero las cifras parecían remontarse a 2006, cuando Barrick adquirió la mina de North Mara.
En una carta confidencial separada obtenida por The Globe and Mail, un alto funcionario de Tanzania le dijo a la compañía que el gobierno está preocupado por las muertes en North Mara, el “incremento” del número de intrusiones por parte de los aldeanos y la supuesta complicidad entre la policía y algunos de los aldeanos que transgreden.
“El gobierno no puede permitir que esta situación continúe”, dijo la carta enviada a un vicepresidente de African Barrick Gold en noviembre de 2014 por Eliakim Maswi, el secretario permanente del Ministerio de Energía y Minerales de Tanzania.
Dijo que la situación requiere una “acción urgente” del gobierno y otras partes involucradas para reducir los enfrentamientos y las muertes y lesiones entre los intrusos y la policía. Las intrusiones estaban aumentando, a pesar de la presencia de unos 160 policías en la mina, dijo la carta.
Dos grupos de activistas independientes, MiningWatch Canadá, con sede en Ottawa, y un grupo británico conocido como Rights and Accountability in Development (RAID), visitaron la mina en julio y agosto. Dijeron que el número real de muertes en la mina podría ser mucho mayor de lo que la comisión informa. Citando informes de fuentes de la oposición y monitores de derechos humanos, dijeron que podría haber habido más de 300 muertes violentas en North Mara desde 1999, incluyendo la muerte de mujeres y niños que no estaban invadiendo la mina.
Alegaron que los registros hospitalarios y los informes post mortem a veces han sido falsificados para ocultar el alcance de las muertes y lesiones relacionadas con las minas. Y dijeron que su propia investigación encontró 22 casos de presuntos homicidios ilegítimos por parte de la policía o el personal de seguridad de la mina en el yacimiento, sobre todo desde 2014.
“Es incomprensible y profundamente preocupante que una corporación tolere tales niveles de abuso en la búsqueda de ganancias”, dijo una declaración de Catherine Coumans de MiningWatch Canada.
Giles Blackham, gerente de relaciones con inversionistas de Acacia, se negó a dar cualquier estimación de muertes relacionadas con la policía en la mina desde que la compañía adquirió la mina en 2006. Pero dijo que las muertes han disminuido drásticamente en los últimos tres años, Y sólo dos de estas muertes se han registrado este año.
La comisión de investigación en North Mara “escuchó las quejas no corroboradas sobre muertes y lesiones relacionadas con la policía” y no intentó validar las quejas, dijo Blackham en respuesta a las preguntas de The Globe.
Dijo que la compañía ha reducido los enfrentamientos violentos en North Mara construyendo muros perimetrales alrededor de las áreas mineras, trayendo a un contratista de seguridad especializado, mejorando sus relaciones con las comunidades locales y convirtiendo en subterráneo uno de los emprendimientos para reducir la huella de la mina y disminuir su impacto en las aldeas.
El número de intrusos en las áreas mineras de North Mara se ha reducido en un 99 por ciento desde 2011, y ha habido un promedio de menos de 10 intrusos al mes en las áreas de minería activa este año, dijo Blackham.