La fiebre del oro llegó a la zona serrana de Chihuahua tras el alza que sufrió el precio del metal a nivel mundial, alcanzando la histórica cifra de mil 854 dólares la onza, por lo que se está comprando a 150 pesos la cubeta de tierra con “alta ley”. Las filas con cientos de personas cargando cubetas para la venta de la tierra se han mantenido durante 12 horas diarias en las oficinas de las principales empresas mineras de la región, ya que por cada una de ellas se obtiene aproximadamente un gramo de oro, que tiene en estos momentos un costo de 65.35 dólares, es decir unos 806 pesos, lo que da a las mineras una ganancia de 656 pesos por cada cubeta.
Las familias propietarias de tierras con “alta ley” están entregando hasta 100 cubetas diarias, lo que les dejaría una ganancia diaria de 15 mil pesos, lo que ha generado se vean obligadas a contratar a personal para extraer el material, reactivando de forma inmediata, y como nunca, la actividad económica de los municipios con perfil minero.
Las autoridades estatales en la materia, Alberto Chretín, secretario de Economía, y Luís Alba, director de Minería, corroboraron que incluso los niveles delictivos de dichas zonas han prácticamente desaparecido con las ganancias obtenidas por la venta rica en metales.
“Es una situación sin precedentes en la historia de la minería en Chihuahua, la mayoría de las ocasiones en que repuntó el oro si mucho llegaba a los 800 dólares la onza, sin embargo, el precio se duplicó y sigue creciendo al punto de que hoy representa ganancias únicas en la historia de la actividad”, destacó Chretín Castillo.
Subrayó que no sólo el oro ha logrado incrementos sustanciales, sino también la plata, lo que beneficia sobre manera a las mineras que trabajan ambos metales a la vez.
Los beneficios de esta situación no sólo son de forma particular a las familias de estos sectores, sino que se ha generado una reactivación económica en general, debido a que la red de proveedores, comercios y prestadores de servicios, que han visto crecer exponencialmente su clientela.
La producción del metal en la entidad se verá beneficiada exponencialmente, por lo que de igual forma podría dotar del primer lugar nacional en extracción en corto lapso.
Cabe destacar que la actividad minera florece precisamente en las zonas donde otras actividades económicas prácticamente no existen, por lo que el auge del metal áureo cae como una auténtica bendición a las familias.
Este tipo de zonas son las más afectadas por los problemas de migración y por el cultivo de drogas, ante la falta de otras actividades que dejen beneficio económico.
