El Centro de Investigación Sobre Inversión y Comercio (CEICOM), llevó a cabo el foro denominado «consecuencias para El salvador por la mina cerro Blanco», en la Asunción Mita departamento de Jutiapa, Guatemala. El proyecto minero en el país hermano, inició en 2007, y a la fecha dicho proyecto ha estado pausado, sin embargo, al parecer están siendo reanudadas las actividades.
Fuente: Diario Co Latino
Edgardo Mira, miembro de CEICOM, planteó que las consecuencias ambientales en el territorio salvadoreño serán graves de seguir con la ejecución del proyecto minero.
«Este contaminará parte del curso del río Ostúa, el cual desemboca en el río Güija, ambos son cuerpos de agua binacionales», argumentó.
El mayor problema recae en el lago de Güija, porque también desemboca en el Lempa, del que parte de la población salvadoreña de la zona metropolitana se abastece de agua potable en un 37%.
Las consecuencias de contaminación serán graves, ya que el agua sería contaminada con arsénico, litio o incluso drenaría ácido, estos elementos son mortales para la población, agregó.
Los elementos geotérmicos afectarán al río, disminuyendo el oxígeno disuelto, afectando la diversidad y la migración de especies entre otras repercusiones.
Por su parte, David Pereira, miembro del consejo de CEICOM, dijo que 14 kilometros del territorio salvadoreño serán los afectados directamente, no obstante será más grande el impacto de contaminarse el Lempa.
«La mina del cerro blanco está ubicado en un manto acuífero termal, que inicialmente la empresa había dicho que el grado del agua era de 80 grados; hoy llega ha 120 grados centígrados, esa agua está hirviendo, además han encontrado cantidades que sobrepasan los estudios de la empresa, lo que indica que las investigaciones hechas por la misma, son superficiales e insuficientes», puntualizó.
Las organizaciones ambientales hicieron el llamado al estado salvadoreño a tomar cartas en el asunto, ya que los riesgos a mediano y largo plazo en el país, serán devastadores, enfatizó Pereira. «Esa mina va a violentar los derecho al agua, a la vida y salud humana», agregó.
Las organizaciones presentaron una denuncia ante la comisión interamericana de derechos humanos que harán una inspección en el terreno y zona minera del país.
Los ambientalista solicitan una legislación que frene los temas mineros en la región, ya que a juicio de Pereira se necesitan políticas adecuadas ante estos proyectos mineros.
Asimismo, organizaciones guatemaltecas apoyan la iniciativa de frenar el proyecto, ya que también afecta 153 kilometros del territorio guatemalteco, dijo Julio González, quien añadió que están estudiando los impactos de la actividad minera, dejando entrever que el país más afectada será El Salvador.
El proyecto minero «cerro blanco» es una iniciativa desarrollada por la sociedad Entre Mares de Guatemala, sociedad anónima, la cual es subsidiaria de la empresa canadiense Goldcorp Incorporation.
