“Este Martes 11 de Marzo se realizó una Audiencia Preliminar en el marco de la causa penal iniciada por el gerente de comunicaciones de la Empresa Minera Yámana Gold, donde se encuentran imputados dos vecinos, por los hechos que ya son conocidos (daños en un vehículo) durante una manifestación frente al local de la empresa”
Por Roberto Ochandio * publicado en Puerta E
Durante la misma, el Señor Gerente perdió el control de sus actos y acusó de fascistas y nazis a las hordas de autoconvocados que se oponen a sus delirios de grandeza.
Grande fue la sorpresa, probablemente incluyendo a la señora jueza en esta sorpresa generalizada, al escuchar esta sarta de incoherencias proferidas por el Señor Gerente. Es obvio que esta persona menosprecia a sus interlocutores y a la jueza a cargo de este caso, y esto es notorio cuando se analiza con un poco de detenimiento el significado de las palabras ‘fascistas’ y ‘nazis’.
Esto no es muy difícil. De acuerdo a Wikipedia, los fascistas…
“… buscaban unificar a su nación mediante un estado totalitario que promoviera la movilización de la comunidad nacional. Estaban caracterizados por tener un partido de vanguardia para iniciar un movimiento político revolucionario con la intención de reorganizar la nación de acuerdo a los principios de la ideología fascista.
Los movimientos fascistas tenían características comunes que incluían la veneración del estado, devoción a un líder fuerte, y un énfasis en ultra nacionalismo y militarismo.
El fascismo veía a la violencia política, la guerra, y el imperialismo como medios para alcanzar un rejuvenecimiento nacional, manteniendo que las naciones tienen el derecho a expandir su territorio desplazando a naciones mas débiles. Al mismo tiempo, la ideología fascista consistentemente mantenía la primacía del estado”.
Mientras que los nazis…:
“… mantenían los mismos principios que el fascismo, pero además incorporando teorías antisemitas y racismo científico. El nazismo en Alemania subscribía a ideas de jerarquía racial y al Darwinismo Social, afirmaba la superioridad de la raza aria, y criticaba tanto al capitalismo como al comunismo por asociarse al materialismo judío”.
Por más que uno estire su imaginación, es difícil encontrar en la sociedad de Esquel, y menos todavía en los grupos ambientalistas en particular, a alguna persona o grupo que encaje dentro de estos parámetros. Mas bien, exactamente lo contrario.
Solo un charlatán descontrolado que desconozca la historia mundial reciente y la realidad Argentina y de Esquel puede hacer semejantes comparaciones.
Pibe…! Agarrá los libros que no muerden…!
* DNI. 7818355