Lo dijo el docente de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (sede Ushuaia) y expositor del 3º Congreso Mundial sobre Cambio Climático desarrollado en La Plata, Jorge Rabassa. Señaló que el deshielo es más acelerado en la Patagonia que en cualquier lugar del mundo y la peor consecuencia es la afectación a las reservas de agua y la contaminación de éstas y los suelos a partir de la minería de alta montaña.

Fuente: Agencia OPI Santa Cruz

17/08/2011. Lejos de constituirse en la opinión de un lego, excusa generalmente en boca de quienes defienden los intereses corporativos de las mineras en detrimento de los recursos naturales y la vida futura en la Patagonia argentina, ayer se produjeron en Fm del Mar, radio de Comodoro Rivadavia, declaraciones del docente de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (sede Ushuaia) y expositor del 3º Congreso Mundial sobre Cambio Climático desarrollado en La Plata, Jorge Rabassa.

Minería

En cuanto al debate minero, el investigador comentó que fue invitado por el Senado de la Nación, donde “expuse mis puntos de vista”, explicó. “La minería de alta montaña es totalmente nefasta para la supervivencia no sólo de los glaciares de suelos constantemente congelados sino también por la contaminación que provoca en las aguas”, recalcó.

“Si trato el mineral con mercurio, cianuro, los efluentes tarde o temprano corren riesgo que contaminen las líneas de drenaje”, especificó Rabassa por Fm del Mar.

“No estoy contra la minería porque nuestra civilización sin ella no puede existir. Lo que pasa es que hay una –actividad minera- que hace al sistema económico nacional y otra que alimenta las expectativas económicas de las multinacionales del oro que desarrollan esta minería de alta montaña”, diferenció.

“Ninguna otra actividad minera actúa en esas condiciones extremas porque no son tan valiosos como para justificar inversiones en esas condiciones extremas”, especificó.

“Nos referimos a la minería del oro, que no aporta nada al sistema económico industrial y productivo argentino sino que alimenta negocios de las empresas multinacionales y nos deja la contaminación”, reclamó.

En torno a la explotación de plata y plomo en la zona de la meseta en Chubut, recordó el debate que tuvo y tiene lugar en Esquel y valoró “la actitud coherente y valiente de la ciudadanía que, resignando posibles beneficios económicos, prefirió una Esquel limpia, dedicada al turismo que no viene a ver mugre ni contaminación sino estos paisajes maravillosos”, concluyó el académico en su ilustrativa explicación por la radio de Comodoro. (Agencia OPI Santa Cruz)

 Mas datos:

 El académico aportó datos preocupantes sobre la situación de los recursos en la zona austral del país tanto por las causas antrópicas, como por el calentamiento global ocasionado (además que por el hombre), por otras cuestiones atmosféricas.Explicó que los afectados serán “los que se encuentran en las cercanías de buena parte de los picos de las montañas” por estar “en condiciones límites en cuanto a su volumen por efecto de calentamiento global”.

“Se conserva menos nieve y menor chance de formar hielo a medida que se va derritiendo”, indicó y detalló que “esto no afectará igual a los mantos de hielo patagónicos, a los campos de hielo en la provincia de Santa Cruz, donde la porción superior está por encima de la línea de nieves permanentes.
Rabassa explicó en Fm del Mar: “Sólo se observará en los glaciares que tienen lengua flotante como el glaciar Upsala, que viene cediendo violentamente en los últimos 25 años”, determinó el investigador del CONICET. “En el Perito Moreno es difícil de predecir con mayor precisión –lo que ocurrirá- porque tiene un comportamiento anómalo. Sí podemos decir que se está angostando pero no podemos predecir si esa lengua flotante se mantendrá en las mismas condiciones o si va a sufrir grandes cambios”, explicó.

“El deshielo en la Patagonia supera en volumen, duplica, la cantidad de agua que se genera en la zona del sur de Alaska y oeste de las Rocallosas de Canadá. Esto fue estudiado por especialistas franceses y son datos fehacientes”, aseguró Rabassa. En ese sentido, detalló que el efecto tiene lugar porque “están más cerca del mar y el aumento de temperatura pone más en zona de riesgo a sus extremos, que están a menor altura”.

“El Upsala retrocederá como lo está haciendo pero no toda su lengua va a desaparecer, y en el caso del Perito Moreno suponemos que va a reducirse pero no se puede predecir el comportamiento por su naturaleza anómala en relación a todos los otros glaciares de la región”, aclaró el docente.

“Estamos en presencia de fenómenos rápidos por este recalentamiento y con una velocidad que supera los procesos naturales”, reiteró. “En Ushuaia, la cuenca que abastece a la ciudad se basa en el agua de la nieve que se acumula sobre los glaciares que están en vía de desaparición y en un futuro no muy lejano la disponibilidad de agua durante el verano se hará muy limitada porque la nieve se derretirá en la primavera”, alertó el investigador.