El agua es un derecho humano, un bien común escaso de todos y no de unos pocos. No es una mercancía sin embargo las empresas y los gobiernos la administran como tal. Con este fin distintas empresas petroleras se reúnen en Comodoro Rivadavia, los días 26 y 27 de agosto en el Hotel Austral, con la venia del Estado, para decidir como gestionan este elemento vital.
Por Foro Ambiental y Social de la Patagonia en Unión de Asambleas Ciudadanas de Chubut
A espaldas de la sociedad como desde hace cien años, se discuten temas tan trascendentales que implican necesariamente un conflicto actual y futuro. El agotamiento y la contaminación generan un impacto no solo local, sino regional y ponen en riesgo la continuidad y el buen vivir de la población y hasta de su propio negocio. Esto queda de manifiesto en el temario propuesto que tiende a estudiar distintas formas de minimizar las consecuencias negativas del uso del agua en la actividad petrolera.
Estas acciones no pueden negar la existencia de normas superiores dictadas por organismos internacionales como la Asamblea General de las Naciones Unidas que declaró en el año 2010, mediante su Resolución 64/292, el acceso seguro a un agua potable salubre y al saneamiento como un derecho humano fundamental para el completo disfrute de la vida y de todos los demás derechos humanos.
Asimismo, la Convención sobre derechos del niño menciona explícitamente el agua, el saneamiento ambiental y la higiene en su artículo 24(punto 2), que estipula que los Estados parte, entre los que se cuenta a la Argentina, están obligados a combatir las enfermedades y la malnutrición, suministrar alimentos nutritivos y agua potable salubre, teniendo en cuenta los peligros y riesgos de contaminación del medio ambiente.
Normas de tal magnitud no pueden ser atropelladas por un pequeño grupo de empresarios que se reúnen de forma apartada aislando a la sociedad a través de un elevado arancel que impide su participación.
Estos grupos de empresas se esfuerzan por aparentar cumplir con las normas ambientales nacionales, mediante informes de impacto ambiental parcializados
No debemos olvidar que el agua es un derecho humano, así reconocido a nivel internacional y ratificado en el último de encuentro de la UNION de Asambleas Ciudadanas de Chubut. Por eso, en el marco de la crisis hídrica que padecemos en nuestra ciudad, se presentó en el año 2012 un proyecto de ordenanza, una Iniciativa Popular que declaraba el agua como derecho humano, bien común, natural y público, el cual logró la adhesión de más de 3.000 firmas.
Sin embargo nuestros representantes jamás pudieron dejar de lado su visión cortoplacista y economicista para pensar en el bien común de su sociedad, y abandonaron este proyecto archivado y sin tratamiento.
Ni siquiera la falta de agua, las movilizaciones y denuncias administrativas hicieron pensar a los gobernantes de turno en el carácter socio-ambiental del agua, en su preservación de forma ágil y preventiva que sólo es posible mediante la intervención de todos los ciudadanos, pensando el agua en forma global, ampliando la mirada a la cuenca hidrográfica, más allá del río o el lago; planteando también sus otras dimensiones que nos permiten sostener que TODOS SOMOS AGUA.
Foro Ambiental y Social de la Patagonia en Unión de Asambleas Ciudadanas de Chubut
Agosto 2015