El Gobierno peruano retirará a militares de la una zona de conflicto minero de Apurimac, tras acordar el inicio de un diálogo con la población que aún mantiene reparos en el desarrollo del mayor proyecto de cobre del país controlado por una firma china.

Fuente: Reuters
El ministro de Interior José Luis Pérez dijo el jueves que informó a los pobladores que viven cerca del proyecto Las Bambas, de 7.400 millones de dólares, que el Gobierno tomó esa decisión para que puedan empezar las conversaciones el 16 de noviembre en busca de resolver la demanda de las comunidades.

“Lo que queremos es un ambiente de paz para dialogar”, dijo el ministro Pérez, en una entrevista con la radio local RPP.

El Gobierno del presidente Ollanta Humala anunció a fines de septiembre el estado de emergencia en varias localidades de la región andina de Apurímac y envió cientos de militares a la zona de conflicto para controlar una protesta que dejó al menos tres muertos, tras duros enfrentamientos con la policía.

Pobladores de la zona reclaman el cambio de planes en la instalación de una planta procesadora de Las Bambas, que afirman acarrearía daños al medioambiente de sus comunidades.

La construcción de Las Bambas, un proyecto de la firma MMG Ltd, filial de la china Minmetals, está casi concluida y comenzaría a producir en los primeros meses del próximo año, según datos de la propia compañía operadora.

Las Bambas produciría 400.000 toneladas anuales de cobre desde el 2017, un fuerte aporte al suministro de este recurso básico de Perú, el tercer productor mundial del metal rojo.