El Movimiento Mesoamericano contra el Modelo Extractivo Minero (M4) denunció que durante septiembre se multiplicaron las agresiones contra los defensores de los derechos humanos y de la tierra en Zacualpan, municipio de Comala, en Colima, donde la asamblea general de comuneros declaró a ese sitio territorio “libre de minería”, por lo que exigió que cesen los ataques contra la asociación Bios Iguana AC y el Consejo Indígena por la Defensa del Territorio de Zacualpan.
Por Movimiento Mesoamericano contra el Modelo Extractivo Minero (M4)
Asimismo, solicitó a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos medidas cautelares para proteger la integridad de los miembros de Bios Iguana AC, así como de los miembros del citado consejo indígena.
En un comunicado, el M4 recordó que la comunidad indígena de Zacualpan, a través de su asamblea general de comuneros, logró destituir al presidente de bienes comunales, Carlos Guzmán, quien apoya al empresario que intenta instalar la mina de oro Gabfer SA de CV.
El 29 de septiembre la policía federal, cumpliendo con la orden del Tribunal Unitario Agrario, ingresó al balneario Ojo de Agua y desalojó al grupo de Carlos Guzmán, entregándolo al comisariado, que encabezan Guadalupe Carpio, Epitacia Zamora y Olivia Teodoro.
“Sin embargo –denunció M4–, en cuanto la policía federal se retiró, el grupo destituido tomó la caseta de cobro y colocó cadenas en la zona de acceso de los vehículos, impidiendo toda entrada o salida al sitio”.
El M4 aseveró también que agentes de la policía municipal presenciaron la citada agresión sin que actuara.
Lamentó que ocho diputados del Congreso del Estado de Colima (tres del PRI, tres del PAN, uno del PRD y otro del Panal) “hayan tomado partido en favor del grupo del depuesto Carlos Guzmán, del saqueo ambiental y de la violación de derechos humanos”.
Añadió que ese mismo grupo, el 19 de septiembre, exhortó al gobernador del estado, Mario Anguiano, “para que la Secretaría de Seguridad Pública vigile que gente extraña a la comunidad no alteren el orden ni la paz pública de dicho lugar”, en clara alusión a la organización Bios Iguana, “criminalizando una vez más la lucha que se lleva junto con el consejo indígena”. Incluso, refirió que Alejandro Bueno Salazar, de Bios Iguana, fue amenazado en Facebook.
El M4 responsabilizó de ello “a Carlos Guzmán y a sus seguidores, así como al gobierno de Colima, que continúa violando los derechos de los pueblos indígenas y de los defensores de los derechos humanos, que les permite actuar en total impunidad en los actos cometidos”.