Observarla era como tener en una misma persona toda la cultura y la escencia misma del pueblo salvadoreño. Las primeras letras de su nombre reflejan lo que ella más defiende. Vidalina Morales, originaria del municipio de Victoria en el departamento de Cabañas, vino a San Salvador para contar lo mucho que ella y Victoria han luchado por salir victoriosos ante un mounstro que brilla, y que dibuja un esbozo del saqueo español en tierras cuscatlecas allá a principios del siglo XVI. Antes fue oro por espejo; hoy es oro por el espejo del “progreso y desarrollo”.
Fuente: Gato Encerrado
Viste de manera sencilla una blusa celeste y falda azul. Se sienta en la mesa desde de donde se dirigirá una conferencia de prensa. Su sonrisa nerviosa avisa que está lista para platicar con los medios, entre ellos, Gato Encerrado.
El Salvador ha sido demandado por $315 millones por la empresa minera canadiense Pacific Rim (actual Oceana Gold), y en septiembre de este año se dará a conocer el fallo de la demanda luego de que el gobierno salvadoreño le prohibiese la explotación minera en el proyecto “El Dorado” en la zona norte del departamento de Cabañas, y solo le permitiese la exploración.
Pacific Rim se basó en los acuerdos internacionales como el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos para interponer la demanda, debido a que no existe TLC directo entre El Salvador y Canadá; además se basó en la Ley de Inversiones de El Salvador.
Actualmente la demanda se debate a través del Centro Internacional para el Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi) del Banco Mundial, y se desarrolla únicamente a través de la Ley de Inversiones de El Salvador, pues el Ciadi afirmó que TLC no es vinculable en este caso.
Si El Salvador pierde la demanda, se verá obligado a pagar la millonaria compensación del erario público, además de ser presionado para que permita la actividad minera en su territorio.
“En Cabañas todos están de acuerdo en no permitir actividad minera por las graves afectaciones al agua y al débil ecosistema que tenemos, y la población sabe que no es cierto tal engaño de progreso y desarrollo que vende la Pacific Rim en Cabañas” expresa Vidalina.
Llegó su turno de hablar ante los medios. Ella, como parte de la Mesa Nacional Frente a la Minería Metálica, le corresponde “hacer un llamado de justicia”, específicamente para denunciar lo que ella llamó “investigaciones vacías” en el caso de la muerte del ambientalista de Cabañas, Marcelo Rivera, quien el pasado 18 de junio cumplió su quinto aniversario de muerte supuestamente a manos de asesinos a sueldo contratados por Pacific Rim por denunciar los daños que ocasinaba la minería en la zona. A la fecha -denuncia Vidalina- solo hay seis personas enjuiciadas por este caso.
Vidalina Morales (celeste) en conferencia de prensa de Mesa Frente a la Minería Metálica. Foto Gato Encerrado/ Alfredo Carías
Ya más en confianza, reveló una de las cosas que se tomaba como un secreto a voces. Alcaldes de los municipios en donde Pacific Rim solicitó actividad minera, fueron “comprados” a cambios de permisos, por apoyo social, y colaboración municipal.
“Por ejemplo el alcalde actual de Sesuntepeque (Cabañas), Edgar Bonilla, ha aceptado en más de una ocasión que recibe ayuda por parte de Pacific Rim dizque para apoyo comunitario” denuncia Morales.
Actualmente Pacific Rim tiene sus instalaciones un tanto abandonadas en Victoria, Cabañas, y por el momento solo se encuentra en el lugar personal de mantenimiento, mientras se dirime la demanda internacional.
El 8 de octubre de 2013, Oceana Gold anunció la adquisición de las acciones y propiedades en El Salvador de la empresa minera Pacific Rim. Por un total de US $ 10.2 millones, la empresa además anunció en un comunicado su intención de buscar una salida “negociada” al “impasse” que ha representado el no otorgamiento de los permisos de explotación de la mina El Dorado en Cabañas, al norte de El Salvador.
“Cuando nosotros nos damos cuenta que Oceana Gold compró el proyecto, y con los primeros comentarios que hizo sobre que ellos trabajan bien con gente de derechas o izquierdas, y que son respetuosos de los Derechos Humanos, nosotros profundizamos en conocer si era cierto, y nos dimos cuenta que no era cierto; por ejemplo supimos que en Filipinas opera esta empresa, y ha hecho graves violaciones a los derechos humanos” denuncia.
Como el oro es un metal noble, no es soluble en agua. Para disolverlo se necesita de una sustancia como el cianuro, que permite formar complejos y estabilizar el oro en las soluciones, o de un agente oxidante como el oxígeno. Para poder disolver oro se necesitan 350 mg/l o 0.035% (como 100% NaCN) de cianuro.
Existen otros agentes, como el cloruro, el bromuro o el tiosulfato, pero los complejos que se obtienen resultan menos estables y es por eso que se necesitan condiciones y oxidantes más fuertes que estos para disolver oro. Estos reactivos son peligrosos para la salud y el medio ambiente y además son más costosos.
Vidalina, defensora de la vida, es solo un ícono de todo un pueblo que teme porque esta vez el oro se lo estén llevando a plena luz del día, tal y como sucediera con los españoles que nos intercambiaron espejos que deslumbraron con su brillo a los indígenas del lugar en la conquista; esta vez puede suceder en nuestra época, eso si, “una vez pasa el ciego”. Las comunidades ya no darán espejo por oro; ya no darán trabajo, desarrollo y progreso por oro; ya no darán ecología por oro.
Vidalina regresó a su casa. A luchar, a informar, a orientar.