Ciudadanos de Potosí ratificaron un paro de labores para los días 27 y 28. El Ejecutivo descarta anular el contrato con Manquiri. Sus trabajadores anunciaron “medidas de hecho” para defender sus fuentes de empleo.
Fuente: diario La Razón
Potosí – 26/10/2009. El conflicto generado en torno a la explotación del Cerro Rico de Potosí -rico en plata, zinc y estaño- se agudiza debido a que los actores involucrados en el mismo mantienen al momento posiciones contrapuestas.
Si bien la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) ya ordenó la suspensión indefinida de las operaciones de la empresa Manquiri en la parte superior del cerro (por encima de la cota 4.400); la dirigencia cívica exige la modificación o rescisión del contrato entre la compañía y el Estado.
En ese sentido, el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) convocó a un paro de labores para este martes y miércoles, confirmó a La Razón el presidente de la entidad, Celestino Condori.
“La exigencia es que se anule ese contrato, eso pone en riesgo al país”, aseguró ayer el ministro de Minería, Luis Alberto Echazú, en entrevista con la radio gubernamental Patria Nueva.
La autoridad reiteró que Manquiri no puede operar en la cima del yacimiento hasta que concluya el estudio geotécnico que determinará los lugares que corren más riesgo y las futuras tareas para preservar su forma cónica.
El profesional contratado para realizar el estudio concluirá el mismo dentro de seis meses, es decir, en abril del 2010, indicó Echazú. Aclaró que mientras tanto la empresa puede operar en otros sectores del cerro.
De su parte, los trabajadores de Manquiri amenazan con “asumir medidas de hecho que garanticen nuestro derecho inalienable al trabajo y al sustento de nuestras familias”. Así lo señala la carta que el comité de empleados de la compañía remitió al ministro Echazú, el viernes.
Manquiri, gerenciada por la empresa San Bartolomé, de propiedad de la compañía estadounidense Coeur d’Alene, trabaja en la explotación de plata a partir de la remoción y procesamiento metalúrgico de pallacos y desmontes del Cerro Rico.
“Una paralización de operaciones de San Bartolomé significa menor ingreso económico y mayor desempleo para el departamento (de Potosí), debilitando la cadena de consumo, generando menos regalías, menos ingresos por impuestos, menor apoyo a la salud y educación, originando la aflicción de muchas familias”, señala la misiva.
Echazú acusó a la Alcaldía potosina de promover la protesta y de no aportar con recursos al estudio del cerro, siendo que recibe regalías por su explotación.
