Los cultivos de hortalizas que fueron regados con las aguas contaminadas del río Pilcomayo, tras el colapso del dique de colas de la empresa minera Santiago de Apóstol de Potosí, empezaron a secarse en al menos siete comunidades del municipio de Betanzos del departamento de Chuquisaca, asentadas a orillas de ese afluente.
Fuente: Observatorio de Industrias Extractivas y Derechos Colectivos
De acuerdo con un reporte de radio Aclo de la Red Erbol, los pobladores del lugar hicieron conocer este hecho al responsable de Medio Ambiente de la Alcaldía de esa jurisdicción, Hilarión Mamanillo.
Según el funcionario público, las poblaciones afectadas son: San Antonio, Kilómetro 127, Viña Pampa, Pocopoco, Villa Quebrada, Villa Candelaria e Incapaca.
Recientemente el alcalde de Betanzos, Esteban Llanos, presentó una denuncia formal al Ministerio Público en contra del propietario de la minera, Jorge Cano, que se encuentra detenido en la cárcel de Catumanrca, por daño ambiental y delitos contra la salud pública.