El Secretario Ejecutivo de la Federación de Trabajadores Mineros de Bolivia, Cesar Lugo, dijo este sábado que la Corporación Minera de Bolivia (Comibol) debe pasar por un proceso de reestructuración porque el Estado es mal administrador, los cargos están politizados y no tienen la capacidad de aprobar proyectos mineros. Alta influencia del neoliberalismo que hace que los sindicatos tengan una visión altamente pro-patronal.
Fuente: diario Los Tiempos
23/04/2011. “La COMIBOL es un botín político. No es una empresa técnica es más de pegas y no se nota un crecimiento a favor de los trabajadores, es mal administrador porque los proyectos se retrasan y no actúan en base a los precios internacionales de los minerales (…) La minería debe tener una institución con la capacidad de solucionar los conflictos”, sostuvo Lugo en delaciones a una radioemisora local.
De la misma manera, señaló que las exportaciones del sector privado de la minería alcanzan al 75 por ciento aproximadamente y las minas estatales cubren el resto con deficiente tecnología y modos de producción.
Lugo cuestionó la capacidad de producción de las empresas mineras bajo la administración del Estado y su aporte de impuestos al país. En la misma línea dijo que las empresas mineras privadas introducen mejor tecnología a diferencia de las estatales cuya forma de producción es muy diferente.
Por otra parte, Lugo aseguró que no permitirán avasallamientos por parte de los cooperativitas mineros quienes solo buscan minas listas para empezar a operar.
Lugo remarcó que cuando se habla de una verdadera reactivación de las minas se debe tomar en cuenta una política que ponga en vigencia nuevas operaciones para que puedan abrir las minas cerradas ya sí poder generar nuevas fuentes de empleo.
La Comibol se creó a través del Decreto Supremo 3196 de 2 de octubre de 1952. Después de la nacionalización de los centros mineros que pertenecieron a Patiño, Hoschild, Aramayo y otros; se encomendó a Comibol la administración y operación de esas minas.