Tres nuevos proyectos, dos de minería metálica y uno de minería no metálica sumará el Tratado de Integración y Complementación Minera, firmado entre Chile y la Argentina, que configura una jurisdicción territorial con plenas atribuciones para la actividad minera. Dos están localizados en Santa Cruz y uno en Mendoza.
Fuente: diario La Nación
Santiago – 258/11/2009. La información fue dada a conocer en el marco del IV Encuentro Minero Chileno-Argentino, desarrollado esta semana en el hotel Hyatt de la capital chilena.
“Hay tres proyectos que se podrían sumar. Para preservar la fuente de información, voy a permitirme no nombrarlos, pero hay proyectos que se salen del rubro netamente metalífero”, anunció Mayoral.
Según contaron a La Nacion fuentes de la Cámara Chileno-Argentina, dos de estos serían en la provincia de Santa Cruz de oro, el mayor de ellos y un tercero en Mendoza, el proyecto de Cerro Cuadrado, compuesto de vetas de plomo.
Mayoral expuso, junto a su par chileno, el ministro de Minería, Santiago González, y el embajador argentino Ginés González García. También asistieron el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami) Alberto Salas; el presidente de la organizadora del evento, la Cámara Chileno-Argentina, Bruno Ardito; representantes de las mineras Barrick Gold y Xstrata Copper; y enviados de la provincia de San Juan, y de las regiones chilenas de Coquimbo y Atacama. En la cita se analizaron los distintos proyectos de inversión, así como también los alcances del comercio bilateral.
El Tratado Minero, firmado en 1997, cuenta actualmente con cinco proyectos que incluyen inversiones por 8000 millones de dólares para la siguiente década. Estos son Pascua Lama (oro), El Pachón (cobre), Amos Andrés (oro y cobre), Las Flechas (oro y cobre) y Vicuña (oro, plata y cobre). Ayer se supo sobre el interés del grupo sueco-canadiense Lundin Mining en los citados proyectos de Vicuña, Las Flechas y Cerro Cuadrado.
El acuerdo establece “la conveniencia de asegurar, en los casos en que las circunstancias lo permitan, el aprovechamiento conjunto de los recursos que se extienden a ambos lados de la cordillera, de tal modo que su exploración y posterior explotación se lleve a cabo en forma racional e integrada, aplicando las normas prácticas de una minería más avanzada”.
“Es una herramienta fundacional a nivel internacional, que promueve la exploración y producción minera conjunta sobre la segunda frontera más extensa del mundo y destaco la importancia estratégica de la integración minera entre los dos países, para fortalecer el crecimiento económico y social de la región, mediante la promoción de emprendimientos que generen desarrollo, empleo y mejor calidad de vida para las comunidades de frontera”, afirmó Mayoral.
“Este tratado es un caso único en el mundo. Nuestro objetivo es que ambos países se conviertan en un polo de la minería y también en un instrumento fundamental para disminuir la pobreza en la Argentina, tal como se ha hecho en Chile”, dijo a La Nación el embajador González García.
Pese a su larga tramitación por desacuerdos impositivos entre ambos países, Pascua Lama ya comenzó sus obras y se constituyó en el primer proyecto levantado conforme al Tratado de Integración, con una inversión de 3000 millones de dólares y una generación de más de 10.000 puestos de trabajo directos e indirectos en Chile y la Argentina. “Todos los proyectos que vienen tendrán un tiempo menor de tramitación porque ya tenemos un proyecto base, una experiencia anterior”, opinó Mayoral.