Los estudios de impacto ambiental siempre predicen el futuro y son optimistas y los consultores no lo hacemos, pero si generalizo sobre mis experiencias, por supuesto que en Pascua-Lama habrá filtraciones de desechos y durante la vida útil de la mina la compañía podrá recuperar las filtraciones a través de pozos. El problema es qué pasará cuando se vaya ¿quién va a pagar para mantener el sitio apropiadamente en un área sísmica? Pascua-Lama tendrá 20 o quizá 35 años de vida útil, pero los desechos permanecerán para siempre”.
La sentencia es del doctor en Ciencias Geológicas de la Universidad de Texas, Robert Moran, quien expuso ayer al mediodía en el Foro Minería y Sociedad sobre el impacto frecuente de la minería metalífera.
Moran explicó que trabaja hace más de 20 años como asesor en geoquímica y la calidad hídrica para inversores privados, reparticiones gubernamentales y organizaciones ciudadanas y resumió desde su experiencia que “para mí sigue siendo importante que como humanos no sabemos pensar a largo plazo”.
El especialista dijo que no está a favor ni en contra de la minería y que sólo traía información de lo que él ha visto para que se saquen conclusiones en el Foro. Trajo al salón del Rectorado varias fotos que mostraban el impacto de la minería en distintos lugares del planeta. Expuso, entre otros, casos como el de una antigua mina de Rumania, una en Nevada (Estados Unidos), una en Bolivia, Guatemala, Honduras, Mongolia, Ganha (Africa) y hasta Siberia. Habló en particular de la rumana, señalando en las imágenes montañas cubiertas con desperdicios de rocas que están llegando a la margen del río, junto con otros comentarios en esos lugares, relacionados con sequía y contaminación.
“¿Hay en verdad un desarrollo sustentable? Jamás he visto una mina sustentable, no digo que no deben aceptar la minería sino que debemos analizar cuáles son los costos que se deben aceptar a cambio”, aseguró Moran.
Agregó en su análisis que “el cianuro es un químico extremadamente peligroso si un ser humano es expuesto a eso. Para la minería se usa una solución diluida mezclada con cal. Es mucho menos tóxica, pero si el PH baja demasiado se puede formar a un gas y matar a sus propios trabajadores. El mayor problema que surge en la contaminación del agua es por los metales y metaloides, pero no es verdad decir que el cianuro no es un problema”.
Y consultado sobre el caso local en particular dijo que “acá en San Juan no sé los detalles, pero la industria no quiere hacerse responsable de su propia contaminación, entonces debo suponer que el gobierno puede forzarlas a que lo hagan”.
Sobre el pago a cambio de la explotación de los minerales, opinó que “no soy experto en regalías e impuestos pero si yo acordara que una mina se estableciera, pediría una ganancia mejor para mí. No sé qué porcentaje sería realista, pero debería ser mucho más alto. Por ejemplo, yo nací en San Francisco, California, donde hay viñedos en todo el Estado y no sería posible políticamente pedir permiso para poner un proyecto minero en la zona”.