Como parte de la arremetida megaminera que pretende instalar dicha actividad en la Provincia de Mendoza, en días pasados se anunció oficialmente que próximamente serán enviados a la legislatura, algunos proyectos mineros para su análisis y aprobación (o no). Los proyectos que suenan con más énfasis son Cerro Amarillo y Hierro Indio, pero también hay varios otros (ver en el mapa). En este escrito hablaremos de Cerro Amarillo.
Ver también:
Hierro Indio: un proyecto minero cargado de dudas en Menzoza
Cerro Amarillo
Es un proyecto minero situado en el departamento de Malargüe, en una zona montañosa entre Valle Noble y Valle Hermoso, en la alta cuenca del Río Grande, dentro de ambientes glaciares, periglaciares y nivales de alta montaña, con algunas lagunas de altura y numerosas vegas altoandinas.
En el análisis del “Informe de la CAMEM” que realizáramos con anterioridad desde este espacio de expresión, se reconoce a este protoyecto con el nombre de “Cajón Grande” y el Nº 14 en los mapas allí incluidos, colindante con otro proyecto de la CAMEM, que es Tango (Nº 13 en el mapa). Se debe aclarar que también que hay otro proyecto minero que se denomina “Cerros Amarillos” (igual, pero en plural), también señalado como “prioritario” por la CAMEM. Desde ya, no se trata del mismo proyecto, sino que es otro, situado en otro lugar. Tambien hay otro denominado Quebrada Amarilla (Nº 16 en el mapa)
El área del proyecto está conformada por 5 cateos, una manifestación de descubrimiento y una mina. En todos los casos, la propiedad de los pedimentos es de Jorge Bengochea y Lydia Espizua. Entre los titulares y la Empresa Constitution Mining Corp existe un Contrato para llevar a cabo la exploración inicial del supuesto yacimiento (digo supuesto, porque estamos hablando de CATEOS, donde en teoría y según lo que dice el Código Minero, solo hay presunción de la presencia de minerales). Luego, a fines de 2013, aparece la empresa que hoy esta haciendo la presentación del proyecto.
La Empresa que lo está desarrollando es Meryllion Resources CORP, de origen canadiense. Por lo que se observa en su web, la firma es relativamente nueva (sus informes financieros arrancan del cuarto trimestre de 2013), conformada por inversores que exhiben experiencia en la temática. Actualmente están desarrollando dos proyectos: el de marras y otro en la provincia de Jujuy, denominado Providencia. El más importante para ellos, es Cerro Amarillo, donde todo es muy reciente: la adquisición, la prospección ya finalizada y las intenciones de desarrollarlo. Así se desprende del amplio informe y la algo más sintética presentación recientemente colgado en la web.
Por lo que se ve, la empresa es muy reciente, sus ejecutivos exhiben amplios curriculum, pero la empresa es completamente nueva, no tiene ninguna experiencia para exhibir y su cartera de proyectos es muy acotada, solo tiene dos, en uno de los cuales ni siquiera han hecho nada…
El Proyecto de Ley de Creación del Parque Nacional Pehuenche
Según la base de datos SIG disponible, se observa que el área del proyecto minero Cerro Amarillo coincide en su totalidad con el área del proyecto de ley nacional de creación del Parque Nacional Pehuenche, presentado el año pasado por el Diputado Nacional Guillermo Carmona en el Congreso de la Nación. Al momento tomar estado público el proyecto, desde este espacio de expresión analizamos sus pro y sus contra, destacando que (en consonancia con la opinión del sector científico) el proyecto de ley debería ser sancionado y llevado adelante.
El informe de la propia Meryllion, sitúa el área de máxima concentración mineralógica en la Laguna del Cajón, uno de los espejos de agua dulce de montaña más grande de Malargüe que constituye uno de los principales valores naturales a conservar en el futuro Parque Nacional.
El proyecto minero Cerro Amarillo, en relación al proyecto del Parque Nacional Pehuenche.
¿Qué buscan?
El gobierno anunció que el proyecto es de cobre, sin embargo, en los hechos concretos las faenas que se están realizando no son para buscar sólo cobre, la propia empresa está diciendo que buscan cobre, oro y molibdeno. Desde ya, si existiera otro mineral no declarado (además de estos tres), seguramente se lo van a llevar mezclado con lo que haya en los concentrados, tal como ya lo hacen en las explotaciones existentes en el país, como por ejemplo en Bajo La Alumbrera.
Violación del Código Minero
Como ya se dijo, el proyecto Cerro Amarillo, esta conformado por 5 cateos, o sea, 5 áreas de permiso para efectuar exploración inicial (también llamada prospección)
En Cerro Amarillo han hecho descubrimientos que no están denunciados ni registrados, y la empresa titular pretende llevar adelante (con la autorización de desprevenidos legisladores e inescrupulosos funcionarios) una exploración avanzada para determinar factibilidad de una explotación metalífera, en concesiones mineras que tan sólo son área de cateo.
En este caso, la Legislatura debe devolver los expedientes al Poder Ejecutivo, para que solicite a los titulares del proyecto y/o de los derechos mineros que procedan a tramitar la manifestación de los descubrimientos efectuados y volver a ser tratados únicamente cuando estos hayan sido publicados en edictos del Boletín Oficial y hayan sido registrados en el Padrón Minero Provincial.
Violación de la legislación ambiental vigente
El Gobierno de Mendoza ha emitido una resolución de Declaración de Impacto Ambiental, en favor de la empresa Meryllion (documento de aprobación ambiental que autoriza a ;a empresa a iniciar la exploración del yacimiento), sin haber llevado a cabo las instancias de Estudio de Impacto Ambiental, Consulta Pública de los expedientes y Audiencia Pública, presupuestos mínimos vigentes en todo el territorio de la Nación Argentina, según la ley nacional 25675 y el articulo 41 de la Constitución Nacional.
Recordemos ademas que el propio Código Minero se subordina en su aplicación a la legislación ambiental, ya que el art 233 del mismo, subordina su aplicación al cumplimiento de las disposiciones establecidas en virtud del art 41 de la Constitución Nacional, que ni mas ni menos, esta reglamentado por la ley nacional 25675.
La legislatura, antes de tratar los proyectos, debe devolvérselos al Poder Ejecutivo para que cumpla con estas instancias obligatorias por ley, ademas debería promover acciones penales para los funcionarios que no cumplieron con la ley general del ambiente.
Violación de la ley de glaciares
El proyecto minero Cerro Amarillo se encuentra en zona de ambiente glaciario y periglaciario, por lo que se encuentran protegidos de acuerdo a la ley nacional 26639. Si bien el inventario de glaciares previsto en la ley aún no está hecho, en cualquier imagen satelital se detectan los rasgos inequívocos de masas de hielo descubierto y glaciares de escombros, induciendo que el área de permafrost ha de ser mucho mayor, evidenciando que se trata efectivamente de un área protegida por dicha ley en donde no se puede llevar a cabo ningún tipo de explotación o exploración minera. La no existencia del inventario de glaciares no es motivo para no tomar medidas en pos de la protección de dichos ambientes que se encuentran legalmente protegidos por una ley de presupuestos mínimos que determina que son intangibles, por lo tanto debe ser aplicado el Principio Precautorio y frenar cualquier tipo de faena minera.
Un detalle no menor con respecto a esto, es que una de las personas que figura como dueña de los derechos mineros que conforman el proyecto, es al mismo tiempo Investigadora del IANIGLA (autoridad de aplicación de la ley de glaciares) y es quien firma los informes técnicos que se presentan en el marco del relevamiento efectuado por dicha institución.
Que debería hacer la Legislatura en este caso: devolver el expediente al Poder Ejecutivo para que lo remita al IANIGLA, para que dictamine al respecto y elabore los mapas zonales correspondientes, determinando las áreas glaciares y periglaciares dentro de todas las concesiones mineras de este y los demás proyectos que andan en danza. Ademas se debe exigir que Lydia Espizua no firme ningún documento técnico vinculado a la Ley de Glaciares ni participe de los relevamientos y/o elaboración de os mapas relacionados con la ley de glaciares, ya que es parte interesada. Aquellos informes firmados por esta profesional deben ser impugnados de alguna forma y vueltos a realizar.
Violación de la ley 7722
Está claro que para extraer los metales que están denunciando haber descubierto, necesariamente emplearán sustancias tóxicas en la lixiviación. En Cerro Amarillo se está buscando oro, cobre y molibdeno, minerales que necesitan lixiviación para su separación, con uso de sustancias prohibidas por la ley provincial 7722. En caso de autorizar el propio gobierno se estaría auto-incriminando y dando lugar a que la empresa luego demande a la provincia por el lucro perdido de la no explotación de su yacimiento ya descubierto y factibilizado, aplicando la “teoría de los actos impropios” que es una herramienta jurídica muy usada en el mundillo legal.
Que debería hacer la Legislatura, en función de esto: Devolver el expediente y solicitar se informe explícitamente y bajo declaración jurada como se van a extraer los minerales que se pretenden explorar.
La Laguna del Cajón es, además de un lugar bellísimo, una de las reservas de agua dulce en estado liquido mas importantes de Malargüe y uno de los valores de conservación mas importantes del futuro Parque Nacional Pehuenche. El área de máxima concentración de oro, cobre y molibdeno del yacimiento, detectado en la etapa de prospección, que potencialmente podría ser explotada, se ubica en los cerros que están junto a ella (foto: www.panoramio.com).
El impacto ambiental de la exploración minera en Cerro Amarillo
Varios funcionarios han declarado públicamente que el impacto ambiental de la exploración de este y otros proyectos mineros metalíferos es mínimo o nulo, sin justificar empíricamente o argumentar desde lo técnico tales afirmaciones, que así, tiradas al voleo, suenan muy temerarias.
En las propias fotos del informe que presentó Meryllion, luego de la prospección, se observa que durante las faenas que incluyeron dicha instancia anterior, han manipulado cientos de tambores de combustibles y lubricantes, cañerías y maquinaria de perforación, con sus respectivos fluidos, sin ningún tipo de protocolo de seguridad, en una zona de glaciares, lagunas de montaña y nacientes de ríos y arroyos… Ahora, para realizar la exploración avanzada tienen que abrir caminos, armar campamentos, introducir maquinaria pesada, manipular químicos y deshechos.
Conviene recordar que muy cerca de allí, en Matancilla y las Choicas, hicieron una exploración similar en 2006: el daño que provocaron se ve desde el espacio y es tratado en el posteo anterior.