Los Senadores Fernando Silva Facetti, Presidente de la Comisión Nacional de Defensa de los Recursos Naturales, Arnoldo Wiens, Presidente de la Comisión de Energía, Recursos Naturales, Población, Ambiente, Producción y Desarrollo Sostenible, y Arnaldo Giuzzio, miembro de la misma Comisión Asesora de la Cámara Alta, realizaron una visita a la provincia de Córdoba, Argentina, donde se reunieron con el Dr. Raúl Montenegro, experto en materia nuclear, para recibir datos técnicos sobre los riesgos que podría representar la instalación de la fábrica de dióxido de uranio “Dioxitek” en la frontera con Paraguay.
Fuente: Cámara de Senadores de Paraguay
El Dr. Raúl Montenegro explicó a los legisladores que la planta de tratamiento Dioxitek de Córdoba recibe diuranato de amonio y lo somete a un proceso para generar Dioxido de Uranio, utilizado para combustible de las plantas nucleares argentinas.
“Luego de 30 años de funcionamiento en Córdoba, se generó un daño ambiental de 57.600 toneladas de residuos radiactivos de baja intensidad, que permanecen sin membrana ni sistema de contención y ocasionan una elevada contaminación del lugar”, sostuvo Montenegro.
Los senadores fueron informados de que Dioxitek constituye una sociedad anónima estatal, siendo el 99% de las acciones pertenecientes a la Comisión Nacional de Energía Atómica -CNEA- y el 1% restante a la provincia de Mendoza.
Dioxitek intentó varias veces trasladar la planta a otros lugares, tales como Despeñaderos, Córdoba, en 1999, San Rafael, Mendoza, en el 2004, y La Rioja, La Rioja, en 2011. Sin embargo, el rechazo de la población de las provincias impidió que se cumpliera tal objetivo.
“La planta de uranio que quieren construir en Formosa fue expulsada de la provincia de Córdoba por la presión ciudadana por el daño ambiental y rechazada en varias provincias, para finalmente tratar de radicarse en Formosa, presumiblemente por un “arreglo” entre Julio De Vido, actual ministro de Planificación Federal, y el Gobernador Gildo de Formosa”, sostuvo Montenegro.cordoba1
Por su parte el senador Fernando Silva Facetti, mencionó que senadores argentinos informaron que De Vido dijo que las autoridades paraguayas no tienen ninguna objeción a la construcción de la planta de uranio.
“Cosa que es mentira, ya que hasta ahora el tema se maneja con mucho hermetismo, ocultando mucha información del proyecto, principalmente al Senado paraguayo, recordando que De Vido es un gran amigo de nuestro embajador Nicanor Duarte Frutos, el cual meses atrás informo que la planta era “sólo para tratar materiales químicos”, expresiones que fueron rechazadas por especialistas argentinos que expusieron en una audiencia ciudadana aclarando que la planta Dioxitek maneja material radiactivo y químico, lo que representa un doble problema, por el alto riego que ello significa para la ciudadanía”, expresó.
En tanto el senador Arnoldo Wiens, señaló que Dioxitek debe dejar su planta en Córdoba capital en un plazo de un año, por un convenio entre el municipio capitalino y la Central Nacional de Energía Atómica (CNEA), tras años de lucha de la ciudadanía de cerrar esta planta.
“Lo que nos hace preguntamos a nosotros: ¿si para Córdoba es una problemática mantener esta planta nuclear, por qué trasladan el problema a Formosa?, interrogó el legislador.
A su vez, el senador Arnaldo Giuzzio, recordó que recientemente ha presentado un proyecto de ley que prohíbe la instalación de plantas nucleares en Paraguay.
“Hemos plasmado nuestra intención y preocupación por esta situación, principalmente por los altos riegos que ello significa para nuestro país y a su vez mostrar a la opinión extranjera que acá en Paraguay no queremos ninguna planta nuclear”, enfatizó.
El Gobierno argentino no ha informado de manera oficial al Gobierno paraguayo sobre los detalles que hacen a la instalación de la planta nuclear en Formosa.