Con el título “Las cicatrices que deja en el planeta la insaciable sed material de la humanidad”, la BBC publicó una serie de imágenes de minas explotadas en el mundo. El impacto visual es enorme, dimensionemos el impacto real…
Fuente: Richard Fisher y Javier Hirschfeld
BBC Future
La mina Carajás, en Brasil, es una de las minas de hierro más grandes del planeta.
Uno de los pozos mineros más grandes del mundo, con 84 tipos de minerales, es la “pegmatita número 3” en Xinjiang, China.
El lago Esmeralda de China, en la provincia de Qinghai, es una zona minera abandonada donde la sal y otros minerales quedaron olvidados en estanques gigantes de tono verdoso.
Como la espiral de una huella digital gigante: la mina del cañón de Bingham, también conocida como la mina de cobre Kennecott, en Utah, Estados Unidos.
La mina de oro Los Filos en el estado de Guerrero, México.
En la Amazonía brasileña, el campamento informal de extracción de oro Esperança IV, cerca del territorio indígena Menkragnoti.
En otra parte de la Amazonía, en Perú, un área deforestada causada por la minería ilegal de oro en la cuenca del río Madre de Dios.
Un estanque de relaves utilizado para almacenar subproductos de la minería de cobre en Rancagua, Chile.
El cobre es una de las principales exportaciones de Chile.
El agua anaranjada de una mina de sulfuro de cobre en desuso cerca de la aldea Lyovikha en los Urales, Rusia.
Una mina de carbón abierta se alza sobre el horizonte cerca de Mahagama, en el estado indio de Jharkhand.
Mina Eti Mine Works en Eskisehir, Turquía, donde el litio, un componente clave de las baterías, se produce a partir de fuentes de boro.
La mina de uranio de Rossing, en Namibia, es una de las minas de uranio a cielo abierto más grandes del mundo, en el desierto del Namib.
La mina de diamantes nevada Mir en Rusia insinúa lo que nuestros descendientes podrían descubrir. ¿Qué harán con estos legados de nuestro consumo?