Dos peritos del Instituto Geológico y Minero de España (IGME) llamados a declarar por el Juzgado de Instrucción número 19 de Sevilla, en el que reside la causa incoada contra cuatro directivos de la compañía minera Cobre las Cruces, han declarado este viernes que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) ha incurrido en un “error de interpretación” a la hora de atribuir a la explotación minera daños al Dominio Público Hidráulico y vertidos de arsénico y otras sustancias contaminantes al acuíro Niebla Posadas.
Fuente: Europa Press
Sevilla, España 17/12/2010. Ante los delitos de daños continuados y contra el medio ambiente que pesan sobre los directivos, estos peritos descartan tales “daños” e incluso los vertidos contaminantes.
En concreto, según el acta de declaraciones, este viernes han declarado ante el Juzgado de Instrucción número 19 Miguel Ramón M.M. y Juan Antonio L.G., ambos peritos del IGME. Su comparecencia surge en el marco de las diligencias incoadas por dicha instancia judicial contra cuatro directivos de Cobre las Cruces, filial de la multinacional canadiense Inmet Mining, a los que se imputan como parte de la querella formulada en su contra por la Fiscalía de Medio Ambiente, Urbanismo y Patrimonio Histórico en base a los expedientes sancionadores incoados en 2008 por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir sobre esta explotación minera que ocupa suelos de Gerena, Guillena y Salteras por la detracción no autorizada de 75.000 metros cúbicos de agua del acuífero Niebla-Posadas, la práctica de 20 sondeos no autorizados y el vertido de arsénico y otras sustancias contaminantes a este cauce hídrico.
Estas prácticas, de hecho, motivaron que la CHG suspendiera la concesión administrativa otorgada a ‘Cobre las Cruces’ para el aprovechamiento del acuífero a través de un sistema de drenaje y reinyección de agua, dado que dicha institución entendía vulnerados los términos de la concesión administrativa.
La declaración del Instituto Geológico y Minero
No obstante, los técnicos del Instituto Geológico y Minero de España que han declarado advierten de un posible “error de interpretación” de la CHG, dado que la detracción de 75.000 metros cúbicos de agua “constituye una cantidad relativamente pequeña” para el volumen del acuífero Niebla-Posadas. A tal efecto, estos peritos descartan que Cobre las Cruces haya infringido daños al dominio público hidráulico “en cuanto a la composición química del agua y su situación hidrodinámica”, pues la CHG habría sufrido un “error” de cuantificación.
Los peritos creen, asimismo, que en el acuífero “hay una tendencia a un incremento de arsénico cuando nos aproximamos a la zona del sector minero”, asegurando que el IGME “no tiene constancia” de que la citada compañía “haya causado vertidos al dominio público hidráulico”, toda vez que el agua del sector del acuífero Niebla-Posadas supuestamente afectado por alta concentraciones de arsénico “no puede ser utilizado para el abastecimiento humano”. Los peritos del IGME, además, niegan tener constancia de que el agua del fondo de la corta minera, en contacto con los minerales, hayan sido reinyectadas al acuífero.
La versión de la Confederación
El por entonces responsable de Aguas Subterráneas de la CHG Mariano Manuel Gregorio P.S., no obstante, declaró el miércoles que ya en mayo de 2008 participó en la elaboración de un informe que revelaba que “el grado de incumplimiento por parte de Cobre las Cruces era general”, pues en la autorización librada el 30 de octubre de 2003 sólo se contemplaban “cuatro o cinco sondeos fuera de la corta” y en 2008 “había 26 sondeos”.
En su declaración ha ratificado que “había una detracción de agua por encima de lo estipulado” y, en cuanto a la concesión administrativa relativa al sistema de drenaje y reinyección autorizado sobre el acuífero Niebla-Posadas, ha explicado que “detectamos tal cantidad de incumplimientos y de fallos del sistema de predicción del futuro que otra cosa distinta a suspender -la autorización- era adentrarse en unas complicaciones exageradas”.
Sobre el modelo matemático de previsión, en concreto, cree este testigo que “fallaba en lo más elemental”, con un riesgo de “desviaciones muy importantes”. Para él, todo esto fue “desconcertante”, porque “era imposible imaginar que pudiera funcionar tan mal” el sistema de drenaje y re inyección y toda la gestión hídrica del complejo.
Juan Luis R.M., también técnico de la CHG, ha testificado que “es una realidad que había unos pozos que fueron clausurados por contaminación de arsénico”, si bien ha reconocido que no puede “precisar” si tal extremo supuso “una contaminación real de todo el acuífero” Niebla-Posadas. De cualquier forma, ha ratificado que “había un nivel de arsénico desproporcionado en la extracción”, mientras antes de 2008 “no se había detectado que saliese agua con arsénico”.