Aznalcóllar, Sevilla, España – 15/04/08. Varios vecinos han organizado la primera marcha andaluza que recordará, el próximo día 26 de abril, la catástrofe ecológica de Aznalcóllar (Sevilla), de la que se cumplen diez años. El desastre de Aznalcóllar fue producido por un vertido de residuos tóxicos en el parque natural de Doñana, en Andalucía, España. La madrugada del 25 de abril de 1998, una balsa de residuos de metales pesados de 8 hm³, procedentes de una mina se rompió por uno de sus lados, liberando gran cantidad de líquido de muy bajo pH (alta acidez). La balsa, situada en el término municipal de la localidad sevillana de Sanlúcar la Mayor, pertenecía a la empresa de capital sueco Boliden-Apirsa. Siete balsas mineras “similares” a la de Aznalcóllar, causante del vertido tóxico permanecen activas en España, con un volumen total almacenado de 20,5 millones de metros cúbicos de materiales líquidos y sólidos.

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Vecinos y ONGs han organizado la primera marcha andaluza que recordará, el próximo día 26 de abril, la catástrofe ecológica de Aznalcóllar (Sevilla), de la que se cumplen diez años. Las organizaciones Adecuna de Aznalcóllar, Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF/Adena han convocado una marcha que recorrerá el Corredor Verde del Guadiamar, la zona más afectada por la rotura de la balsa minera de Boliden.

En la madrugada del 25 de abril de 1998 se produjo la rotura de la balsa de residuos mineros de Aznalcollar (Sevilla-España) ocasionando un vertido de lodos y aguas ácidas con graves consecuencias para el medioambiente y los sectores productivos, agricultura fundamentalmente de la zona.
De este accidente se hicieron eco todos los medios de comunicación nacionales y extranjeros ante el hecho de que el vertido se producía en el río Guadiamar, tributario del río Guadalquivir por la margen derecha y alimentador, cuando sus caudales son extraordinarios, de los humedales del parque Nacional de Doñana. De no haber sido por esta circunstancia el accidente no habría trascendido como lo hizo pasando a ser uno más de los que con frecuencia se producen en el mundo.
El parque nacional de Doñana es el paraje natural más importante de Europa y zona clave de paso, invernada y cría para numerosas especies de aves migratorias y sedentarias. Por otra parte es el último reducto de importantes especies en vías de extinción como el águila imperial, el lince, el calamón o la focha cornuda. Más de un centenar de especies de aves y medio centenar de mamíferos, anfibios y reptiles viven de manera permanente o estacional en un privilegiado ecosistema.
Fue declarado parque nacional en 1978, está incluido en la lista de humedales de importancia internacional del Convenio Ramsar en 1982, declarado ZEPA (Directiva 79/409 CEE) Reserva de la Biosfera (programa MAB de la UNESCO en 1984). Tiene una superficie de 50.720 has mas 26.000 has de áreas periféricas de protección.

El sentido de esta acción, han señalado hoy a Efe fuentes de la organización, es recordar la catástrofe medioambiental que se produjo hace diez años y de la que la Administración no ha aprendido nada al autorizar un complejo minero de cobre a cielo abierto en las inmediaciones de Aznalcóllar, en referencia a la Mina Las Cruces.

Las administraciones públicas sólo van a incidir en estas fechas sobre las acciones que han acometido de recuperación del Guadiamar’, han denunciado los ecologistas, que incidirán, no obstante, en su marcha del día 26 en que existe un ‘peligro real de repetir en el futuro catástrofes similares’.

En su recorrido por la zona afectada por la rotura de la balsa minera de Boliden Apirsa, los convocantes incidirán en la ‘situación de dejadez actual del Corredor Verde del Guadiamar’, cinco años después de finalizar su restauración.

También destacarán, durante su recorrido ‘de sensibilización y denuncia’ la ‘situación actual de la balsa que reventó’, mostrando los residuos que se almacenan en las cortas de Aznalcóllar y Los Frailes.

Según han denunciado los conservacionistas, persisten los peligros de contaminación del acuífero Niebla-Posadas y las filtraciones contaminantes hacia el arroyo de los Frailes que desemboca finalmente en el Guadiamar.

También han enfocado su denuncia hacia los ‘riesgos de catástrofe ambiental’ de la Mina de las Cruces (Gerena) por la contaminación del acuífero Niebla-Posadas y por el vertido tóxico de metales pesados al Guadalquivir en la localidad sevillana de La Algaba.

Los actos del día 26 se iniciarán en las proximidades de las instalaciones mineras de Cobre Las Cruces, adonde llegarán autobuses provenientes de las ocho capitales andaluzas.

Allí se celebrará un acto de protesta y la lectura de un manifiesto contra esta actividad minera.

Posteriormente, la comitiva se desplazará hasta el Parque de Actividades Medioambientales (PAMA) de Aznalcóllar, donde se visitará las cortas de las minas de Aznalcóllar y de Los Frailes.

La marcha culminará en el área recreativa del Corredor Verde del Guadalquivir, a la altura del puente de las Doblas, donde se celebrará un almuerzo con productos ecológicos.