Más de dos millones de toneladas de lodos y desechos mineros que contienen mercurio, plomo y arsénico, entre otros elementos tóxicos, se vierten al río Bolaños desde hace ocho días.

Fuente: diario La Jornada

Zacatecas, México – 16/08/2010. Hace una semana se desbordó la presa de jales de la mina Bolaños, en la población del mismo nombre, ubicada en el oriente de la sierra Los Huicholes, en el norte de Jalisco.

Trabajadores de la mina (propiedad de Grupo México) informaron que parte de la cortina de la antigua presa de jales, que acumulaba aproximadamente dos millones de toneladas de desechos, se colapsó la noche del 7 de agosto.

Según empleados, hasta este domingo se habrían vertido al río Bolaños unas 400 mil toneladas de químicos usados para procesar plata, zinc, plomo y oro.

La empresa ni siquiera ha intentado contener el derrame, y las lluvias recientes llevan al río lodos tóxicos acumulados durante décadas.

Habitantes de Bolaños y de localidades ubicadas aguas abajo, entre ellas Chimaltitlán, San Martín, La Joya y Mamantla, reportaron mortandad de peces en el río, lo que preocupa a campesinos y ganaderos.

Según los mineros, la empresa no ha detenido el derrame, con el argumento de que se está construyendo otra presa de jales.

Lo más grave, acusó un empleado, es que la mina no ha dejado de operar. “Todos los días se procesan aquí entre 30 mil y 45 mil toneladas de concentrados (mineral en bruto extraído de la mina), que son sometidas a proceso metalúrgico y cuyos desechos siguen arrojándose a la presa de jales colapsada”.

Aunque medios locales han informado que Comisión Nacional del Agua y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente saben del asunto, no han detenido la contaminación.

Los trabajadores no quieren que la mina cierre, pues se perderían 220 empleos: sin embargo, aseguran que ya habían advertido a la minera que la presa estaba mal diseñada, pero los directivos sólo ordenaron desazolvarla.