Fue aprobada la solicitud para enviar una misión, dentro de la reunión del Comité de Patrimonio Mundial de la UNESCO, celebrada en Polonia, para que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) pueda visitar Michoacán y evaluar amenazas, daños actuales y potenciales del proyecto minero del Grupo México.
Fuente: El Despertar
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De acuerdo a las resoluciones aprobadas en la reciente reunión del Comité Patrimonio Mundial de la UNESCO, México recibió severas recomendaciones, en torno a la vaquita marina y la Mariposa Monarca.
De acuerdo al biólogo marino y ambientalista, Alejandro Olivera, existe la preocupación de organismos internacionales, como la UNESCO, de que el hábitat de la Mariposa Monarca permanece vulnerable ante la tala ilegal.
Existen también planes para reabrir una mina de cobre, ello a pesar de que el proyecto sería incompatible con los principios de conservación de la Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca.
Ante ello, la UNESCO pidió al gobierno mexicano que dicho proyecto no puede ser autorizado, por el impacto negativo que pudiera tener en esa zona.
Cabe resaltar que la resolución se refiere al proyecto minero del Grupo México, mismo que ya tiene una autorización de impacto ambiental, el cual le fue otorgado por la Semarnat, hace un lapso de diez años, para explotar materiales, como zinc, cobre, plata y oro, en túneles subterráneos.
De acuerdo al plan de manejo de esta área natural sí está permitida la minería, siempre y cuando se apegue a la normatividad ambiental. En la actualidad se tiene en pausa la expansión de dicho proyecto, porque se requiere una autorización de cambio de uso de suelo, mismo que estaría en manos de la Sermarnat su aprobación.
Se ha hecho hincapié en solicitar una misión de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) para que pueda visitar el sitio (Angangueo, Michoacán) y de esta manera evaluar las amenazas, daños actuales y potenciales del proyecto minero.
El experto en materia ambiental afirmó que no solo se tratar de inscribir un sitio como Patrimonio Mundial, sino que implica responsabilidades para los gobiernos. No se trata únicamente de designaciones para atraer turismo. Lo que es una realidad es que el gobierno mexicano no solo ha descuidado los sitios de patrimonio mundial, sino que permanece callado ante la crítica internacional; pero aún así, distorsiona los hechos.