Empleados de la minera canadiense Almaden ingresaron por la fuerza y con amenazas a terrenos en el municipio de Ixtacamaxtitlán, Puebla. La minera pretende hacer una mina a cielo abierto en la región donde tiene concesionadas 56 mil hectáreas.
Fuente: Regeneración
Ver también:
- Acusan invasión de minera Almaden en Ixtacamaxtitlán
- Estudio indica que minera canadiense en Ixtacamaxtitlán causaría daños irreversibles
Regeneración, 2 de mayo de 2017. Ixtacamaxtitlán, Puebla.- Con amenazas y uso de la fuerza, rompiendo una cerca y sin permiso de los propietarios, empleados de Almaden Minerals y de su filial Minera Gorrión se introdujeron a terrenos de la comunidad de Loma Larga en Ixtacamaxtitlán donde quieren hacer una mina a cielo abierto para la extracción de oro y plata.
De acuerdo con denuncias de los vecinos, fueron el geólogo Daniel Santamaría y otra persona a la que sólo conocen por el nombre de “Fredy”, quienes se introdujeron por la fuerza a sus propiedades, cerca de las 16:30 horas de este lunes 1 de Mayo.
Los mineros llegaron en camionetas de la empresa canadiense y no les importó la existencia de cercos ni que los propietarios de los terrenos tuvieran estacionado un vehículo en el acceso. Tiraron la cerca con el letrero que les prohibía el paso por tratarse de una propiedad privada y amagaron a los habitantes.
“Con carácter agresivo me amenazaron de pasar sobre mi carro y de echarme a los federales por impedirles el paso. Me dijeron que si tengo muchos huevos, ellos también los tienen. Y que si no se arregla por las buenas, ellos tienen otras maneras de arreglarlo”, explicaron.
A través de sus empresas filiales Gorrión, Gavilán y Zapata, la canadiense Almaden Minerals tiene concesionadas 56 mil hectáreas de terreno en el municipio de Ixtacamaxtitlán en los predios Caldera 3-A, Caldera 3B, ambas del 21 de noviembre de 2012 con vencimiento en el mismo día y mes, pero del año 2062.
En los trabajos que la minera desarrolla en la zona se han detectado violaciones a los derechos a la salud, al agua y a un medio ambiente sano, así como a la consulta previa, libre e informada sobre el destino de la región y de sus recursos, al que el Estado mexicano está obligado por el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, como se documentó en el informe “Minería canadiense en Puebla y su impacto en los derechos humanos. Por la vida y el futuro de Ixtacamaxtitlán y la cuenca del río Apulco”.