La Iglesia Católica de América Latina a través de sus obispos, hace un llamado a la consulta popular y la transparencia en las concesiones mineras, destacando que el verdadero desarrollo debe centrarse en el bienestar humano y ambiental. Reafirmaron su compromiso con las víctimas de la minería y la economía extractivista en general. Por ello, protegen a las comunidades afectadas por la actividad, ya que de los 844 conflictos mineros existentes en Brasil en 318 realizan seguimiento directo. La Iglesia que está presente en áreas vulnerables como las regiones fronterizas e indígenas, ha denunciado los abusos de las empresas y exigido reparación integral para las víctimas. Afirmando además, que el déficit fiscal no puede ser pagado por el pueblo mediante la minería destructiva.

Por: Agustín de Vicente

En sus encíclicas Laudato Si’ y Laudate Deum, el Papa Francisco nos exhorta a cuidar y defender la vida en todas sus expresiones: desde las personas y los territorios hasta la naturaleza, los animales, las plantas, el agua y el aire. Francisco no solo dirige este mensaje a los católicos, sino también a toda persona de buena voluntad, pidiendo que las grandes corporaciones dejen de destruir los ecosistemas y de intoxicar a las comunidades.

El Santo Padre destaca la importancia de que las voces de los obispos y pastores de las comunidades afectadas se unan al clamor de los pueblos para enfrentar la devastación causada por la explotación extractivista.

La iglesia católica en América Latina: defensora de las comunidades afectadas por la minería

Entre abril y octubre de 2024, los obispos de América Latina se reunieron en Aparecida (Brasil) y en Panamá, siguiendo las enseñanzas del Papa sobre la ecología integral. Estos encuentros se enfocaron en los impactos negativos de la minería en las comunidades y territorios locales.

Asamblea en Aparecida: Reflexiones sobre la minería y la ecología integral

Durante la 61ª Asamblea General de la CNBB (Conferencia Nacional de Obispos de Brasil) realizada en Brasil, se lanzó el Atlas de las Iglesias en el Cuidado de la Casa Común, que documenta los conflictos mineros en el país. Según este informe, 318 de los 844 conflictos mineros identificados en 2021 contaron con seguimiento directo de entidades eclesiásticas. La Iglesia, presente en áreas vulnerables como las regiones fronterizas e indígenas, ha denunciado los abusos de las empresas y exigido reparación integral para las víctimas.

Dom Vicente Ferreira, presidente de la Comisión de Ecología Integral y Minería, señaló:

“Proteger a las comunidades es una misión que exige compasión, solidaridad y una denuncia firme del extractivismo que genera pobreza y destrucción.”

Los impactos de la minería en las comunidades

Las voces de obispos como Dom Beto Breis y Dom Giovani Caldas han destacado los efectos devastadores de la minería en ciudades como Juazeiro y Niquelândia, donde la pobreza se profundiza tras el cierre de operaciones extractivas. En la Amazonía, proyectos de bauxita y gas han fragmentado comunidades, asfixiando economías locales y deteriorando el medio ambiente.