Un nuevo golpe se llevó la transnacional minera canadiense ante los tribunales de Justicia de Costa Rica, al serle rechazada una apelación a una sentencia en su contra por parte de la Sala Tercera. La minera deberá pagar 53,3 millones de colones, tras perder un juicio por difamación y supuesta afectación de la imagen de la minera contra el biólogo de la Jorge A. Lobo, sentencia que apeló la minera, pero rechazada.

Foto: El biólogo de la Universidad de Costa Rica (UCR), Jorge A. Lobo.

Fuente: El País

Mediante Voto No. 951-2013, dictado a las 14:26 horas del 31 de julio, la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia, declaró inadmisible el Recurso de Casación planteado por Industrias Infinito S.A. en el caso contra el biólogo Jorge Arturo Lobo Segura, profesor de la Universidad de Costa Rica (UCR).

La minera deberá pagar 53,3 millones de colones, tras perder un juicio por difamación y supuesta afectación de la imagen de la minera contra el biólogo de la Jorge A. Lobo, sentencia que apeló la minera, pero rechazada.

Como acción civil resarcitoria, la empresa canadiense pretendía obtener un millón de dólares por el supuesto daño a la imagen de la transnacional, a causa de declaraciones de Lobo, divulgadas en el documental “El oro de los tontos”, del Director Pablo Ortega.

Sobre ese fallo, la portavoz de Infinito, Yokebek Soto, al comentar la sentencia que ordena el pago de las costas, daños y perjuicios contra el biólogo Jorge Lobo, dijo a medios nacionales que: “Vamos a apelar el fallo porque nos parece muy grave que una persona pueda ampararse en la libertad de cátedra para ofender y dañar el buen nombre de una empresa como la nuestra”. Sin embargo, la acción legal de los abogados mineros no tuvo éxito.

Infinito Gold ha pretendido construir una mina de oro a cielo abierto en Crucitas de San Carlos, zona norte de Costa Rica, a tres kilómetros del río San Juan, fronterizo con Nicaragua, pero sus intenciones fracasaron en los tribunales de justicia.

La empresa perdió un juicio ante el Tribunal Contencioso Administrativo (TCA), que anuló los permisos y un decreto del ex presidente Oscar Arias Sánchez, que declaraba dicha actividad minera de “Interés Público y Conveniencia Nacional”.

En octubre, la Jueza Saylin Ballestero, del Tribunal Penal, del Segundo Circuito Judicial de San José, con sede en Goicoechea, absolvió de todos los cargos a Lobo.

Para la Jueza, Lobo “no dijo hechos falsos. No han sido probados como falacias”, y puntualizó que “las irregularidades de la empresa ya habían sido dichas por el Tribunal Contencioso Administrativo”.

Además, Ballestero analizó que las manifestaciones de Lobo no podían dañar la imagen de la empresa porque ya la misma “no gozaba de buena imagen”.

Igualmente, recordó que estudios de opinión de la época demostraron que el 86% de los costarricenses estaban en contra de la minería.

“Las declaraciones que se le achacan a don Jorge Lobo, las realiza en virtud de un derecho constitucional como es la libertad de cátedra”, apuntó Ballestero.

De seguido aclaró que Lobo expresó su criterio técnico como catedrático hablando de una sentencia de un Tribunal.

“Todos los ciudadanos pueden discutir y analizar una sentencia de un Tribunal”, defendió la Jueza.

Ballestero también resaltó que existe libertad de expresión y libertad de cátedra y todos los ciudadanos tienen derecho a expresar sus opiniones.

Ya la minera perdió un juicio contra el también profesor de la Facultad de Derecho de la UCR, Nicolás Boeglin, y le quedan pendientes tres más contra los diputados de Acción Ciudadana, Manrique Oviedo y Claudio Monge, así como contra Edgardo Araya, abogado ambientalista de la Unión Norte por la Vida.