Las FARC y el ELN, los dos principales grupos guerrilleros de Colombia, acordaron unir fuerzas en contra de megaproyectos de exploración minera, hidroeléctricas, monocultivos de madera y agrocombustibes que se desarrollan en el departamento de Antioquia (noroeste).
Foto: Tanja Nijmeijer, integrante de las FARC.
Fuente: Informador
Así lo asegura un comunicado de la Dirección del frente “Darío Ramírez Castro” publicado hoy en la página electrónica del Ejército de Liberación Nacional (ELN), fechado en la Serranía de San Lucas, ubicada en el extremo norte de la cordillera Central que pertenece a los Andes.
El documento señala que a comienzos de este mes se reunieron en algún lugar “los principales mandos” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del ELN, para luchar contra los megaproyectos de esta parte del país.
“En las conclusiones a que llegaron se comprometieron a seguir luchando contra los mega-proyectos de explotación minera, las grandes represas para hidroeléctricas y el mono cultivo de maderas y agro combustibles, que empobrecen a la gente y al medio ambiente”, dice el comunicado.
Agregan que dentro del “plan de lucha acordado” ya han realizado acciones, una de ellas el pasado 12 de febrero, en la que mataron a dos soldados de la Fuerza de tarea Nudo de Paramillo.
En Antioquia se construye actualmente el Proyecto Hidroeléctrico Iguanto, la que será, cuando entre en servicio en 2018, la más grande de Colombia, que podrá generar hasta 2.400 megavatios.
La central será alimentada por el río Cauca, que es la segunda arteria fluvial en importancia del país, después del Magdalena.
En otros comunicados publicados hoy, los rebeldes insisten en que la llamada “locomotora minero energética” es la gran responsable de la explotación de los trabajadores y de los recursos naturales.
Agregan, además, que la huelga que desarrollan los trabajadores del Cerrejón (norte) y el “paro cívico” de Arauca (frontera con Venezuela) son parte de “la lucha de las masas que arrancaron con bríos en 2013”.
El pasado 7 de febrero, 5.657 trabajadores de El Cerrejón, la mina de carbón a cielo abierto más grande de América, ubicada en el departamento de La Guajira, entraron en una huelga indefinida tras fracasar una negociación que buscó solucionar una disputa de salarios y otros beneficios laborales.
Actualmente las FARC y el Gobierno Colombiano llevan a cabo diálogos de paz en La Habana, para buscar salidas políticas y ponerle fin al conflicto armado que castiga al país andino desde hace casi medio siglo.
La semana pasada esa guerrilla liberó a dos policías y a un soldado, a quienes tenía secuestrados.
Por su lado, el ELN también entregó a una misión humanitaria a tres colombianos y dos peruanos, empleados de una minera a los que secuestró en el norte de Colombia.
Un sexto empleado de la minera Geo Explorer, Jernoc Wobert, sigue en manos de los rebeldes, quienes dijeron hoy en otro comunicado que “el canadiense se queda”.
El ELN además tiene en su poder a los hermanos alemanes Uwe y Günter Otto Breuer, jubilados que recorrían el país en su propio vehículo cuando fueron hechos cautivos en noviembre pasado en la región del Catabumbo, fronteriza con Venezuela, acusados de ser espías.