Todos los días decenas de camiones con sustancias altamente tóxicas -ácido sulfúrico, cal viva y nitrato de amonio- suben por Avenida Kennedy, Avenida Las Condes y Camino a Farellones rumbo a la Mina Los Bronces sin respetar las estrictas restricciones que los obligan a transitar desde las 00:00 hasta las 06:00, para evitar los peligros a que se exponen los vecinos en caso de accidentes. En el último año dos de esos camiones volcaron en Lo Barnechea. El último ocurrió el 28 de marzo y las 20 toneladas de nitrato de amonio derramadas llegaron a 20 metros del curso que alimenta la planta de agua potable. Nadie controla.

Fuente: Centro de Investigaciones Periodísticas CIPER

07/04/2012 Hacía sólo 12 minutos que el camión con su carga de emulsión de nitrato de amonio había salido de la Avenida Las Condes para empalmar con el Camino a Farellones (Ruta G-21) en Lo Barnechea, única vía para llegar a su destino: la Mina Los Bronces de Anglo American. Al llegar a la curva del kilómetro 7,5 el chofer perdió el control de la máquina y la emulsión explosiva de color café plomizo se desparramó por la quebrada. El estrecho canal que corta la pendiente a escasos metros de la carretera, estaba seco. Un hecho fortuito que impidió que el nitrato de amonio explotara, lo que puede ocurrir cuando entra en contacto con agua. Pero el peligro persistió: la sustancia se acercaba peligrosamente al curso de agua que alimenta la planta potabilizadora de Aguas Cordillera. La alerta roja se encendió y muy pronto la seremi de Salud, bomberos y personal de la Onemi de la Región Metropolitana rodearon el sitio del siniestro. El tránsito quedó prohibido para todo vehículo.

El accidente ocurrió al filo del mediodía del miércoles 28 de marzo. Y a pesar del despliegue de personal de emergencia y de la minera Anglo American, nadie en la comuna de Lo Barnechea y tampoco de Las Condes supo del peligro que se escurrió durante horas por una pendiente muy cerca de sus hogares. La Seremi de Salud sí lo tenía claro: las 20 toneladas de nitrato de amonio en emulsión derramadas quedaron confinadas a sólo 20 metros del curso de agua del cual se abastece la planta potabilizadora de Aguas Cordillera y que abastece a gran parte del sector oriente de Santiago. La Seremi de Salud Metropoltana dio aviso a la empresa de agua potable para que pusiera en marcha de inmediato a sus planes de emergencia. La limpieza durará 10 días.

CIPER se encontraba en el lugar y pudo constatar que el chofer del camión, Carlos Irarrázaval, resultó con heridas leves ya que pudo saltar a tiempo fuera del vehículo mientras éste se desbarrancaba.

El camión con sustancias altamente explosivas que conducía Irarrázaval, de propiedad de una empresa subcontratista de Enaex (Empresa Nacional de Explosivos), no era el primero en tener un accidente en esa curva y en ese camino. De esos accidentes, poco o nada se sabe. Y lo más grave es que tanto ese camión como las decenas que diariamente transitan llevando materiales tóxicos y peligrosos hacia la mina de Anglo American, lo hacen precisamente fuera de las horas que la autoridad les fijó perentoriamente: entre las 0:00 y las 6:00 de la mañana. La investigación que venía realizando CIPER ya había constatado que el tránsito a horas no permitidas es la norma.

De hecho, la misma tarde del peligroso accidente del miércoles, CIPER descubrió a las 19:50 otro camión llevando a la Mina Los Bronces una nueva carga de emulsión de nitrato de amonio, en plena Avenida Las Condes, en la intersección con Avenida La Dehesa, a la hora peak del taco.

Ninguno de los ocupantes de los vehículos que rodeaban ese camión sospechaba el riesgo que corrían en caso de una colisión: al contacto con otros químicos el nitrato de amonio presenta reacciones explosivas y puede provocar irritación en las vías respiratorias de quienes queden expuestos a la sustancia. Lo mismo ocurre con los camiones que llevan diariamente a la mina de Anglo American otras sustancias tóxicas, como cal viva, la cual reacciona con el agua y puede provocar irritación y quemaduras.

La sustancia más peligrosa que llevan los camiones que van hacia la Mina Los Bronces es ácido sulfúrico: inflamable al entrar en contacto con otras sustancias, produce quemaduras al contacto directo, puede reaccionar con el agua y provocar una suerte de humo tóxico que daña severamente las vías respiratorias.

La emergencia por el peligro de contaminación de la planta San Enrique tiene antecedentes. En agosto de 2006 la producción de agua potable de cinco plantas que abastecen al sector oriente de Santiago debió paralizar a raíz del volcamiento en la misma zona de un camión que llevaba sustancias tóxicas para la mina de Anglo American. Fueron 18 mil litros de nitrato de amonio los que se derramaron. Sólo unos meses antes, otro camión que llevaba combustible a la Mina Los Bronces, volcó contaminando las aguas del Río Mapocho lo que tambièn obligó a paralizar las plantas potabilizadoras de agua.

ALERTA MAXIMA

-Yo iba detrás del camión y cuando me disponía a pasarlo, me di cuenta que ese vehículo no venía muy bien balanceado: en cada curva, a pesar de que venía entre 40 y 60 kilómetros por hora, la tolva se movía mucho de un lado a otro. Al llegar a la curva del kilómetro 7,5 el chofer perdió totalmente el control y se fue cuesta abajo, cayendo primero la parte de atrás. Yo paré de inmediato un poco más adelante y vi como salía el chofer, sangrando y en shock -contó a CIPER Andrés Tomas, quien vive a un costado del kilómetro 11 del Camino a Farellones.

La primera en socorrer al chofer fue la dueña del sitio donde se desbarrancó el camión:

-Escuche el estruendo y salí. Vi una gran nube de polvo y un camión volcado en mi terreno. De repente, asomó un joven desde la cabina del camión y como pudo se sentó al lado del vehículo. Se le notaba aturdido. Yo comencé a gritarle que saliera de ahí, que el camión no estaba muy asegurado y que podía seguir cayendo. Me escuchó y comenzó a subir por la quebrada hasta mi jardín Venía sangrando por un lado de su cabeza… Le pase una silla, se sentó al tiempo que se agarraba la cabeza y decía: “perdí mi trabajo”, “me van a echar” y “yo no debería estar aquí ya que hoy era mi día de descanso, pero me mandaron igual” –relata María Cristina Dastres.

Poco después el lugar era acordonado y completamente aislado por trabajadores de la Municipalidad de Lo Barnechea, de la minera Los Bronces, la Seremi de Salud y bomberos, todos los cuales comenzaron a trabajar para retirar la sustancia del roquerío. Había urgencia.

-El nitrato de amonio no sólo es contaminante: este insumo con agua explota. Por lo tanto, es peligroso. Potencialmente podría causar gran daño, podríamos tener personas heridas y a nosotros lo que nos interesa es salvar vidas. Por eso tiene mucha importancia que nos hagamos presente para coordinar y trabajar aquí de inmediato -manifestó a CIPER Miguel Muñoz Barraza, director de la Onemi de la Región Metropolitana, quien inspeccionó la zona del accidente en la misma tarde del miércoles.

El peligro del que habla Muñoz Barraza hizo que las labores de contención del líquido derramado continuaran hasta que anocheció. Sólo una pista de la ruta quedó en funcionamiento.

El nitrato de amonio y la emulsión de nitrato se ocupan tanto en la fabricación de explosivos para la minería, como para fertilizantes en la agricultura. No es un producto corrosivo, pero en el caso de que afecte a afluentes de río o napas subterráneas, cambia el PH del agua y acidifica el líquido, lo que puede afectar la vida que se desarrolla alrededor de esas aguas. “Pero cuando hay una presencia importante de inhalación de una persona en un periodo prolongado, irrita los ojos y el tracto respiratorio”, explica el profesor de la Facultad de Ingeniería de la UDP y experto en medio ambiente, Raimundo Bordagorry. El académico agrega que es una sustancia que reacciona ante otras como combustible, por lo que se debe evitar el contacto con otros químicos.

A pesar de que los accidentes de sustancias peligrosas se han repetido en el Camino a Farellones (Ruta G-21) y en el Camino La Disputada (G- 245), estas rutas siguen siendo usadas por la minera Anglo American para su división Los Bronces, ubicada en el kilómetro 25 del Camino La Disputada. Una cifra que podría ir en ascenso por el aumento del flujo de camiones pesados de Anglo American desde que en 2007 comenzaron los trabajos de expansión de la mina Los Bronces, cuyo objetivo es producir 400 mil toneladas anuales de cobre, lo que equivale al 49% de la producciòn de Codelco en 2011.

-Antes no pasaban tantos camiones, pero desde que la mina está expandiéndose, calculamos que pasan cerca de 200 diarios por el camino. ¡Imagínese! -cuenta una de las vecinas del inicio de la Ruta a Farellones, que lleva más de 30 años viviendo en el lugar.

Lo que los vecinos ignoran es que el mayor peligro al que se exponen es por la carga de los pesados camiones que suben a Los Bronces: nitrato de amonio, cal viva y ácido sulfúrico, una sustancia que “produce impacto en las napas de aguas subterráneas, la flora y fauna, y al contacto directo puede producir graves quemaduras y hasta la muerte”, explica el experto Raimundo Bordaborry.

Esa fue exactamente la razón por la cual las municipalidades de Las Condes y Lo Barnechea le impusieron a Anglo American un horario estricto de circulación a los camiones que transitan con estos tóxicos: desde las 00:00 hasta las 06:00 horas los días hábiles. Y deben circular lentamente a esas horas -y no otras- por las vías más transitadas del sector: Avenida Kennedy, Avenida Las Condes y el Camino a Farellones.

Como no hay fiscalización y la policía que cautela la seguridad del Camino a Farellones no tiene ninguna información sobre esta prohibición y tampoco facultad para controlar los horarios de tránsito de estos camiones, los vehículos destinados a Anglo American pasan por esas vías a las horas punta de la mañana, hasta el mediodía, y en las horas del taco de la tarde, exponiéndose a una colisión de insospechadas consecuencias en medio del masivo flujo vehicular en el barrio alto de la capital. Tal como lo constató CIPER el miércoles 28 y jueves 29 de marzo.

El martes 27 de marzo, CIPER registró 48 camiones que transitaron desde Avenida Las Condes hacia el Camino a Farellones en dirección a la Mina Los Bronces. El registro comenzó a las ocho de la mañana y terminó a las 12:30 e incluye dos camiones de Copec con combustible.

RESPONSABLES DE LA CARGA

Las empresas contratadas por Anglo American para llevar las sustancias tóxicas hasta la Mina Los Bronces son: Transcargo, que lleva el ácido sulfúrico: Servired se encarga de la cal viva; y el nitrato de amonio, emulsión de nitrato de amonio y detonadores de explosivos, son transportados por camiones de Enaex que a su vez también subcontrata esta función.

Transcargo es una empresa perteneciente al grupo Pullman Chile; Servired es de propiedad de Hugo Javier Silva Canillas y Ximena Alejandra Guajardo Arellano y Enaex tiene como principales accionistas a Sigdo Kopper S.A. (empresa que distribuye insumos a la minería en Chile y Latinoamérica), Inversiones Austin Powder Chile Limitada e Inversiones Santa Filomena Limitada.

Como los tres productos que transportan los camiones de estas empresas para Anglo American están calificados como altamente peligrosos, el reglamento de Evaluación de Impacto Ambiental establece que deben declarar el plan de ruta que seguirán los vehículos, los tipos de camiones que utilizarán y las medidas de seguridad en caso de volcamiento o algún accidente en el camino, además de sus principales clientes. Sus planes fueron aprobados por el Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental con altas condiciones de seguridad.

Transcargo obtuvo la aprobación en 2004, Servired en diciembre pasado y la empresa de explosivos Enaex, en noviembre de 2011. Esta última fue precisamente la empresa responsable del camión que se volcó el miércoles 28 de marzo con nitrato de amonio.

En su declaración de Impacto Ambiental sobre la ruta que seguiría hasta la mina Los Bronces, Enaex declaró que cuatro camiones al mes saldrían de su Planta “Polvorín Peldehue”, ubicada en Colina y 160 camiones serían despachados mensualmente desde su planta en Mejillones hacia la misma mina. Los camiones que vienen de Mejillones transitan por la Ruta 5, luego doblan en el cruce de esta carretera con Américo Vespucio en el límite entre Conchalí y Huechuraba, llegan a Avenida Kennedy, para luego tomar Avenida Las Condes hasta el inicio del Camino a Farellones. Allí transitan hasta el sector conocido como Corral Quemado, donde toman una vía sin pavimentación con dirección norte, que llega a la entrada de Los Bronces. En tanto, para los vehículos que vienen de “Polvorín Peldehue” en Colina, la ruta parte en la Autopista Libertadores hacia el sur, hasta el cruce con Américo Vespucio, para después realizar el mismo trayecto anterior por Avenida Kennedy hasta la faena minera.

La declaración de Impacto Ambiental de Enaex muestra que, para llegar con sus explosivos a diversas faenas mineras del país, los camiones cruzan un total de 33 comunas de la Región Metropolitana, entre ellas zonas con alta densidad poblacional: Maipú, con más de 805.503 habitantes; Puente Alto, con 713.270 habitantes; y Las Condes, con más de 289 mil habitantes. Enaex también fue autorizada a transitar con su carga peligrosa por Lo Barnechea, comuna que tiene a su cargo el Camino a Farellones.

Servired, la empresa que transporta cal viva hasta Los Bronces, declaró una ruta parecida para sus 276 viajes mensuales a Los Bronces. El trayecto parte de su bodega en Quilicura. Para el transporte de acido sulfúrico, la empresa Transcargo declaró que 25 camiones diarios cruzarían hacia el oriente por Avenida Santa María, para luego empalmar con Avenida Kennedy, siguiendo la misma dirección que los camiones de Enaex y Servired hasta Los Bronces.

Y para todas las rutas y camiones el horario fue perentorio: desde las 00:00 hasta las 6:00 horas.

Como pudo constatar CIPER la violación a la normativa es habitual. Sólo en la mañana del martes 27 de marzo, CIPER comprobó que a las 8:50, a la hora del mayor taco vehicular, doblaban por la Avenida Las Condes en dirección al Camino a Farellones, tres camiones de Enaex con su carga de emulsión de nitrato de amonio en dirección a Los Bronces. Las matriculas de esos camiones son: CJXV88, CJXV92 y WA8587. A las 9:30 les siguió un cuarto camión –matricula CJXV93- con nitrato de amonio. La misma violación a la norma la protagonizó un quinto vehículo, esta vez llevando una carga de cal viva, a las 11:55 horas (matrícula BDRF95). Un sexto camión, también con cal viva (matrícula BPVK87), venía detrás.

Los cuatro camiones que llevaban nitrato de amonio y emulsión de nitrato de amonio a Los Bronces en horas de alto flujo y prohibidas, en rigor no son de propiedad de Enaex. Esta empresa subcontrató los servicios de Transportes Gil. La búsqueda de CIPER sobre otras infracciones dio resultados. El camión de esa empresa patente CJXV92, se encuentra actualmente sin seguro obligatorio y con una multa impaga desde el 23 de marzo del año pasado por circular por la comuna de Recoleta en “un lugar prohibido” para camiones con cargas peligrosas.

ANGLOAMERICAN IMPONE SU LEY

La investigación de CIPER en la minera, vecinos, policías, bomberos, empresas de transporte involucradas y funcionarios de las distintas comunas afectadas, arrojó que el tránsito de los camiones con carga peligrosa a horas no permitidas se ha hecho habitual. Y ello se debe a las exigencias de Anglo por las metas de aumento de su producción y la expansión de Los Bronces.

Pero no sólo se viola la norma de los horarios restringidos. También hay cambios de ruta. Por ejemplo, CIPER comprobó que Transportes Gil despacha a Los Bronces sus camiones cargados de nitrato de amonio desde Quilicura y no desde Colina o Mejillones, como lo declaró Enaex al Servicio de Estudio de Impacto Ambiental en 2011.

En cuanto a la carga de cal viva, Servired declaró ante el servicio de impacto ambiental que el recorrido de sus camiones partiría en sus depósitos en Quilicura, siguiendo por la Ruta 5 hasta empalmar con la única vía que lleva a la minera de Anglo American. Sin embargo, al llegar a la dirección inscrita, CIPER comprobó que allí funciona una empresa de maquinarias y envasados. A ello se suman las cinco multas que la empresa ha tenido que pagar a la Inspección del Trabajo por no cumplimiento de los días de descanso de sus empleados, por no llevar el registro de horas de trabajo y turno y por “no adiestrar a los trabajadores en el uso correcto de los elementos de protección”.

“Los camiones no pueden subir en estos horarios e igual lo hacen. Todo el mundo lo sabe, pero usted sabe también, son Anglo American, ¿y quién les va a decir algo?”, comentó uno de los empleados municipales a CIPER, mientras trabajaba en la contención del nitrato de amonio derramado por el camión de Enaex el miércoles 28. Ese accidente, ocurrido a mediodía, fue una prueba más del incumplimiento de Anglo American a las normas de seguridad ambiental establecidas.

VIVIR SORTEANDO CAMIONES Y TOXICOS

El estrépito que Eugenio Fernández sintió esa mañana del 3 de abril de 2011 en su casa lo hizo volcarse hacia la puerta de salida y mirar el reloj. Eran las 7:40 de la mañana y la angustia le secó la boca: hacía sólo diez minutos que sus hijos habían partido al colegio en el bus de la municipalidad que cada día los recoge. Desde su casa ubicada en el kilómetro 8 del Camino a Farellones, Fernández recuerda:

-Salgo y veo justo en la puerta de entrada de mi casa un camión volcado y el líquido oscuro que se derramaba por la carretera y caía directo a la quebrada. Partí enseguida a prestar ayuda al chofer, pero éste me dijo que estaba bien y que no me acercara porque transportaba un químico altamente peligroso. Me insistía en que yo no respirara. Asustado, subí hacia mi casa y desde lejos miré lo que pasaba.

El chofer, Ildebrando Estrada Mena, salió ileso y pudo dar la alarma a Anglo American, desde donde avisaron a bomberos. Pocos minutos después personal de la Mina Los Bronces, carabineros y bomberos rodearon todo el sector. Ese día el camión volcó casi tres mil litros de nitrato de amonio en la pendiente de la carretera, la misma sustancia que cayó por el barranco este miércoles 28 de marzo. “Aquí a mi casa no vino nadie, ni siquiera a preguntar como estábamos o a decirnos qué precauciones debíamos tomar”, cuenta Eugenio Fernández.

El parte de Carabineros señala que el camión que volcó el 3 de abril del año pasado, lo hizo por exceso de velocidad en una de las curvas donde no se debe superar los 40 kilómetros por hora. El operativo de contención de la sustancia tóxica involucró además a personal de la Onemi, Seremi de Transportes y la PDI. Entre todos levantaron diques alrededor del nitrato de amonio mientras los empleados de la empresa de explosivos, enfundados en trajes especiales, recogían el líquido con elementos plásticos. El Camino a Farellones se mantuvo cortado por cerca de diez horas.

Los vecinos del último tramo de Las Condes y Lo Barnechea y del Camino a Farellones ya están en alerta y listos para ponerse pintura de guerra en sus rostros. Si el accidente del camión de abril de 2011 les despertó la inquietud, el que protagonizó otro camión el pasado miércoles, nuevamente con nitrato de amonio y en el mismo recodo del Camino a Farellones (a sólo 300 metros del accidente de 2011), los dejó francamente atemorizados. Y los recuentos reforzaron la molestia contra Anglo American. Recordaron el camión con cal viva que volcó en 2009 en el mismo sitio donde cayó el vehículo con nitrato de amonio este miércoles.

-Yo llevo muchísimos años viviendo aquí y puedo decir que cuando estaba la mina La Disputada, subían camiones, pero por la noche y nunca tantos. Desde que llegó Anglo American (2000), la cosa cambió: ahora es imposible vivir aquí con la cantidad de camiones que suben a diario. Todos los vecinos hemos tenido muchos problemas. Cuando salgo por las mañanas, el camino está completamente tomado por los camiones que suben a la mina. Al mediodía son los autobuses de Anglo American que suben con los trabajadores para el cambio de turno, después los camiones que bajan, y a la noche otra flota de camiones que transita subiendo y bajando –explica María Cristina Dastres, dueña del terreno donde cayó el camión con cal en 2009 y el segundo con nitrato de amonio del pasado miércoles.

Hasta este viernes el nitrato de amonio continuaba desparramado en el terreno de su propiedad, al igual que el camión. María Cristina intentó varias veces contactarse con ejecutivos de Anglo American pero nadie le da una respuesta. Si hasta el año pasado sus planes eran instalar una piscina en el extenso jardín, ya lo descartó por miedo a que otro camión vuelque hacia su terreno derramando un tóxico mortal.

La ira de María Cristina es la misma que sienten los vecinos del sector de Avenida Las Condes que empalma más arriba con el inicio del Camino a Farellones y por idénticas razones. No sólo los camiones con sustancias peligrosas transitan a toda hora, sino que también se estacionan a un costado de la bifurcación entre Avenida Las Condes y la Ruta G-21, esperando a las camionetas de Los Bronces que los escoltan diariamente hacia la mina.

-En la mañana, esas camionetas van delante de los camiones subiendo el Camino a Farellones con un cartel que indica el número de vehículos que viene detrás. Porque así se alerta a los camiones que vienen bajando desde la mina a esa hora, de mucho tráfico, y que representan el peligro mayor por la pronunciada pendiente –explica uno de los trabajadores de la Mina Los Bronces

Ante el silencio de las autoridades y de todos, porque ninguno de esos accidentes ha concitado ni siquiera unos minutos en las noticias, los vecinos de Las Condes y Lo Barnechea han decidido organizarse. Exigen que Anglo American habilite un camino alternativo para sus camiones. En la noche del jueves 29 se informaron de los caminos jurídicos de que disponen para lograr que Anglo American trace y habilite una ruta que parta del norte de Colina y que se interne en la cordillera para llegar a Los Bronces.

La ira subió de nivel cuando supieron que la Municipalidad de Lo Barnechea y el Ministerio de Obras Públicas (MOP) anunciaron que se realizaría una licitación para realizar mejoras en el Camino a Farellones (Ruta G-21). Los trabajos tendrían un costo de US$ 62 millones, los que serán financiados por Lo Barnechea, los centros de esquí, los usuarios (peajes) y la Mina Los Bronces, que aportará un millón de dólares. Un monto que según informó la revista Qué Pasa, el MOP consideró mezquino: “pero en la minera lo estiman que es suficiente ya que el nuevo trazado parte en Corral Quemado, después del ingreso a Los Bronces. Además, cuentan con el respaldo del municipio, que defiende el acuerdo logrado con la minera”, se lee en la nota.

Ya en 2008 el MOP, la Municipalidad de Lo Barnechea y Anglo American invirtieron $1.500 millones en arreglos de pavimentación en la ruta G-21, de los cuales $500 millones fueron aporte de Anglo.

Según todas las fuentes consultadas por CIPER, la relación entre Lo Barnechea y Anglo American es estrecha. Además de pagar semestralmente el 44,9% de su patente en dicha comuna, equivalente a $ 48.946.000, la municipalidad recibe otras donaciones de la minera. En 2010, por ejemplo, Anglo American aportó a la Municipalidad de Lo Barnechea $272.870.535 por concepto de “Donaciones para Educación”, de los cuales $116.870.532 fueron destinados a la implementación del Taller de Mecánica del Complejo Educacional Eduardo Cuevas Valdés. El mismo año entregó $72 millones a la Corporación Cultural de la comuna.

En paralelo, los vecinos afectados se sientes desprotegidos y violentados. Al peligro por las sustancias tóxicas se agregan otros problemas. CIPER observó, por ejemplo, como el miércoles 28 de marzo muchos de los vecinos que son habitualmente trasladados por un bus de la municipalidad hasta el final del Camino a Farellones, tuvieron que subir a pie ya que el bus fue detenido por la policía en el kilómetro 7. Un matrimonio con una niña de 6 años subía a duras penas para llegar a su casa mientras se le abría paso a las 20:15 horas a un bus Pullman con trabajadores de Los Bronces por la única pista habilitada en el Camino a Farellones. Desde las 19:00 y hasta las 21:30, a Anglo American se le permitió subir ocho buses con sus trabajadores a las instalaciones mineras, mientras el desfile de ciudadanos continuaba.

Tanto la falta de información a los vecinos de los peligros a los que están expuestos por la violación de las normas de seguridad ambiental en que incurre Anglo American, como la falta de sanción para ellas y la no exigencia de que la minera habilite su propia ruta para no arriesgar a la población, hacen recordar lo que el presidente de Codelco Juan Villarzú afirmó a CIPER respecto de la actitud de Anglo American en el conflicto que mantiene con Codelco por el 49% de la propiedad de Los Bronces:

-Chile es África para Anglo American. Mira, si Cynthia Caroll, la ejecutiva máxima de Anglo, tomó el avión, se vino a Chile y llamó para que la recibiera el Presidente Sebastián Piñera de un día para otro. Afortunadamente, Piñera no la recibió. Pero en su lógica, ella venía a hablar con el Presidente para arreglar este tema. No entiende que el Presidente no tiene por qué recibirla.