Como un acontecimiento histórico calificaron en Arica el rechazo del Comité de Ministros al proyecto minero Manganeso Los Pumas. Diversas entidades lucharon durante años tenazmente por este objetivo, como la Junta de Vigilancia del Río Lluta y la municipalidad.
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Fuente: Publimetro
Estaba en riesgo el cauce natural del río ya que se iban a acumular alrededor de 30 millones de toneladas de relave. Diversas entidades lucharon durante años tenazmente por este objetivo, como la Junta de Vigilancia del Río Lluta y la municipalidad.
El alcalde ariqueño, Salvador Urrutia Cárdenas, expresó su reconocimiento y apoyo a todos quienes nunca claudicaron en defensa del medio ambiente y del valle de Lluta, ante un proyecto que presentaba gravísimas falencias de tipo técnico que, según dijo, hacían absolutamente imposible su aprobación.
“Estamos felices y felicitamos a todos los que dieron la lucha por esto, en que la Municipalidad de Arica también se comprometió. Destaco a los a los agricultores de Lluta y a su Junta de Vigilancia, ellos fueron los que dieron la batalla más importante y los felicitamos de corazón”, señaló el jefe comunal.
Agregó que se había ganado una batalla muy importante por la protección del medio ambiente en la cuenca del río Lluta, la más amenazada por el desarrollo del proyecto Los Pumas, poniendo en riesgo el cauce natural del río con alrededor de 30 millones de toneladas de relave que se iban a acumular.
Una de las más felices con la decisión de rechazar el proyecto Los Pumas, principalmente por los riesgos sísmicos, la posible afectación de acuíferos en la zona y por aspectos antropológicos, fue la secretaria de la Junta de Vigilancia del Río Lluta, Soraya Pavleón Castro.
“Ha sido un día excepcional para nosotros, de mucha alegría. Era lo que realmente esperábamos y como lo ha dicho nuestro alcalde, para nosotros este resultado significa un éxito, ya que creemos en la institucionalidad”, afirmó.
La dirigente felicitó el apoyo de la comunidad ariqueña, el gran trabajo de la abogada Gabriela Meza y del presidente de la Junta de Vigilancia, Eduardo Cortés Monroy.
