bol_potosi2_120A raíz de protestas de potosinos. El Gobierno boliviano dijo el martes que ordenó la suspensión parcial de la explotación minera en el famoso Cerro Rico de Potosí, afectando tanto a decenas de cooperativas mineras como a una empresa subsidiaria de la estadounidense Coeur D’Alene Mines Corporation.

Fuente: Reuters
La Paz 21/10/2009 –

La medida fue tomada para evitar el colapso del yacimiento de plata, que está sometido a una intensa explotación durante casi cinco siglos, desde los tiempos de la colonización española, dijo a reporteros el viceministro de Política Minera, Gerardo Coro.

La decisión fue confirmada al día siguiente de que organizaciones cívicas de la ciudad sureña de Potosí realizaran un paro exigiendo la paralización total de la minería en el Cerro Rico, para preservar la “estructura morfológica” del yacimiento, cuya silueta está representada en el escudo nacional.

Coro dijo que la prohibición temporal, que tiene efecto inmediato, alcanza a todas las labores mineras en el Cerro Rico a más de 4.400 metros sobre el nivel del mar y durará mientras se complete un estudio geológico sobre la situación del yacimiento, en cuya superficie se han detectado al menos 136 hundimientos.

“Inclusive el estudio puede determinar que sectores debajo de la cota 4.400 tampoco se puedan tocar, porque no siempre hay una línea recta que arriba está mal y abajo esta bien”, advirtió.

En el Cerro potosino hay también extracción minera en centenares de instalaciones operadas por cooperativas entre 4.000 y 4.400 metros de altitud, según fuentes de la industria.

El viceministro dijo que el Gobierno espera que la empresa Manquiri, la filial de Coeur D’Alene Mines, y las cooperativas mineras, que explotan plata en concentrados ricos también en zinc, no cuestionen la prohibición, de la cual aseguró que se basa “estrictamente en consideraciones técnicas”.

Manquiri explota plata no directamente del Cerro Rico sino de los desmontes formados tras siglos de extracción mineral, en un proyecto denominado San Bartolomé que entró en operación hace unos dos años y se ha constituido en uno de los principales negocios internacionales de la corporación estadounidense.

“Sus contratos le han dado derecho a operaciones (sobre los 4.400 metros) que ya ha llevado adelante, en la práctica la empresa ya ha sacado casi el 100 por ciento de mineral de ese sector y no tiene por qué decir que va a seguir operando después del estudio”, agregó Coro.

Señaló que el proyecto San Bartolomé no debería paralizarse porque abarca también otras áreas de desmonte del mismo Cerro Rico.

Una fuente de Manquiri confirmó a Reuters que la empresa fue notificada de la prohibición emitida por la estatal Corporación Minera de Bolivia.

“Por el momento el único dato que puedo dar es que esto se está analizando al interior de la empresa (…), no podemos adelantarnos con ningún criterio por el momento (…) para dar una respuesta oficial”, dijo en una declaración por teléfono.

Las exportaciones de zinc y plata representaron aproximadamente dos tercios del valor de las exportaciones mineras de Bolivia en el 2008, que sumaron unos 1.517 millones de dólares según cifras oficiales preliminares.

San Bartolomé y la mina San Cristóbal, controlada por la firma japonesa Sumitomo, son los proyectos de plata más grandes actualmente en operación en Bolivia.