Como cada día 4, se realizaron marchas y actividades en distintos lugares de la provincia de Chubut para manifestar el rechazo a la megaminería, actividad que pretenden imponer los gobernantes, legisladores y operadores al servicio de las corporaciones extractivistas.

En Esquel, cientos de vecinas/os se congregaron en la plaza San Martín para realizar la tradicional marcha que se sostiene desde hace más de 15 años.  En esta ocasión se recordó  otro 4 de agosto especial: 5 años atrás, en 2013, se iniciaba “la otra campaña” para recolectar firmas que avalaran el proyecto de ley construido por las asambleas para prohibir la minería metalífera y de radioactivos en todo el territorio de Chubut, mediante el mecanismo constitucional de INICIATIVA POPULAR.  Si bien el proyecto resultó tergiversado y descartado el 25 de noviembre de 2014 en una sesión que pasaría a la historia como un fraude a la voluntad popular, las movilizaciones de las/los chubutenses siguen creciendo y resistiendo las sucesivas embestidas mineras.

Compartimos el documento leído en la marcha de Esquel.

DOCUMENTO DE LA ASAMBLEA DE VECINOS AUTOCONVOCADOS POR EL NO A LA MINA DE ESQUEL, LEÍDO EN LA MARCHA DEL 4 DE AGOSTO DE 2018

Hoy el pueblo de Chubut está movilizado y más unido que nunca para defender su territorio, sus oportunidades, su presente y su futuro.  Desde hace 20  años se vienen sosteniendo épicas resistencias a basureros nucleares, y sucesivos intentos de habilitación de la megaminería en nuestra provincia.  Ya va siendo hora de que los representantes respeten la voluntad popular y dejen de serles funcionales a los intereses de las corporaciones extractivistas que quieren arruinarnos.  Por eso:

  • Repudiamos el accionar del gobierno nacional, que ofrece los minerales de nuestro territorio en las ferias mineras y en las negociaciones internacionales,  mientras ajusta y ahoga económicamente a la población chubutense, generando un escenario de empobrecimiento y desesperación favorable para la imposición del extractivismo como única salida. Sabemos que no lo es, por el contrario: la habilitación de la megaminería no es la solución para ninguno de nuestros problemas; es más, agravaría los que ya tenemos y sumaría nuevos.  Miremos como ejemplo las provincias mineras: ¿cómo están Santa Cruz, San Juan, Catamarca?  Se han empobrecido, están contaminadas irreversiblemente y a merced de la voluntad de las empresas, que tienen más poder que los gobiernos corrompidos.
  • Repudiamos a los jefes comunales e intendentes de la meseta chubutense, quienes jamás han gestionado para generar oportunidades laborales para sus comunidades y ahora se prestan a las maniobras de los operadores mineros del gobierno nacional, del gobierno provincial y de las cámaras empresarias.
  • Repudiamos el cambio de postura del gobernador Mariano Arcioni, quien hiciera campaña electoral apelando a slogans ambientalistas contrarios a la explotación minera y ahora propicia el falso y remanido artilugio del “debate”, para que los lobistas mineros ganen espacios públicos y sigan intentando imponer sus intereses.
  • Repudiamos a  los diputados como Alfredo Di Filippo, que sólo trabajan para habilitar la zonificación y la explotación minera  que sacrificaría dos tercios del territorio provincial, arruinando  el destino de comunidades enteras y la posibilidad de desarrollar actividades verdaderamente productivas. También a los diputados como Javier Touriñan que proponen una consulta popular provincial, tramposamente anudada a la campaña electoral.  Sabemos que en momentos de campaña las corporaciones suelen estar bien dispuestas para sponsorear candidatos y movilizar el aparato de corrupción y cooptación de voluntades, lo cual se facilita en un escenario de gran vulnerabilidad social.
  • Repudiamos a las empresas mediáticas que se venden al mejor postor y se dedican a la propaganda de la actividad minera pese a ESTAR PROHIBIDA EN NUESTRA PROVINCIA POR LA  LEY 5001. El Diario El Chubut y el Diario Jornada le dedican primeras planas y mucho espacio a los  eventos y falsas selecciones laborales organizadas por operadores mineros; sin embargo, no han publicado una sola línea sobre la multitudinaria marcha que hubo el pasado 28 de julio en Rawson, donde miles de chubutenses salieron a las calles a gritar su NO A LA MEGAMINERÍA.

Y además de los repudios, necesitamos recordar  que TODAVÍA NOS DEBEN UNA LEY: la ley que presentamos por iniciativa popular, la que tergiversaron y descartaron el 25 de noviembre de 2014.  Si hubiera diputados/as chubutenses que quisieran demostrar su respeto por la  voluntad popular, deberían tomarla en sus manos y presentarla nuevamente en su versión original.  Siempre se está a tiempo de tener un acto de dignidad política a la altura de las circunstancias.  Seguimos soñando, seguimos exigiendo que la iniciativa popular se transforme en la ley que necesitamos para ponerle fin al asedio megaminero.

Por todo esto, vecinas y vecinos, debemos seguir resistiendo, marchando, difundiendo información, expresando públicamente nuestras ideas y posturas,  luchando como siempre y con más fuerzas.  Con la convicción de que estamos defendiendo nuestro territorio, nuestro derecho a elegir de qué modo vivir, de qué modo proyectar el futuro para una provincia que tiene grandes posibilidades de desarrollo verdaderamente sustentables, que tiene mucha gente valiosa y valiente para forjar el destino que nos merecemos.

¡NO A LA MINA! ¡NO PASARÁN! ¡NO PASARÁN! ¡NO PASARÁN!

Esquel, Chubut, Patagonia rebelde, 4 de Agosto de 2018.