Esquel, Chubut, Argentina – 24/11/06. El 24 de noviembre año 2002 los esquelenses realizan la primera marcha por el NO A LA MINA, debido a la preocupación de la población por la inminencia del comienzo de la explotación de un yacimiento de oro y plata cercano a esta ciudad chubutense del cual es titular Minera El Desquite S.A., subsidiaria de la canadiense Meridian Gold Inc. La vigencia de una decisión a favor de la vida y contra el saqueo.
La empresa minera permanece en la ciudad con oficinas y depósito. Mientras tanto, el intendente Rafael Williams le renovó el año pasado las habilitaciones comerciales y el gobernador Mario Das Neves no le ha retirado la concesión del yacimiento a Minera El Desquite e impulsa la actividad minera en la mayor parte del territorio de Chubut.

Varias asambleas de vecinos realizadas a lo largo de ese mes de noviembre desembocaron en la decisión de salir a la calle de manera masiva para rechazar el proyecto minero. El mismo venía siendo observado y analizado críticamente en los meses previos en diversos talleres y encuentros que autónomamente realizaron diversos grupos vecinales.

El uso de cianuro, el enorme consumo y riesgo de contaminación del agua, el deterioro de las actividades agropecuarias y turísticas, los escandalosos beneficios fiscales, la complicidad de la clase política de todos los niveles de gobierno y el manejo de los bienes naturales fueron algunos de los ejes del debate y la toma de posición de los vecinos.

Las repercusiones de esa movilización fueron inmediatas: el gobierno provincial postergó la audiencia pública no vinculante prevista para diez días después –4 de diciembre- donde supuestamente se analizaría el estudio de impacto ambiental del proyecto.

Esa primera marcha del 24 de noviembre del 2002 brindó un triunfo inicial a los esquelenses que determinaron marchar el 4 de diciembre para festejar la postergación de la audiencia pública. A partir de allí todos los días 4 hasta el presente los vecinos de Esquel continúan movilizándose bajo la consigna NO A LA MINA.

Actualmente el proyecto minero está paralizado por el contundente rechazo social expresado en el plebiscito del 23 de marzo del 2003, las marchas mensuales y variadas manifestaciones de oposición, así como también por el amparo ambiental determinado por la justicia de la provincia en todas las instancias que detuvo el emprendimiento, pero que la minera objeta con un recurso de queja ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

La empresa minera permanece en la ciudad con oficinas y depósito. Mientras tanto, el intendente Rafael Williams le renovó el año pasado las habilitaciones comerciales y el gobernador Mario Das Neves no le ha retirado la concesión del yacimiento a Minera El Desquite e impulsa la actividad minera en la mayor parte del territorio de Chubut.

ASAMBLEA DE VECINOS AUTOCONVOCADOS DE ESQUEL

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