Entrevista con Darcy Marud, fuera gerente de Meridian Gold, la minera expulsada por los vecinos de Esquel. Hoy es gerente de YAMANA GOLD, que hace pocos días fue echada de esa ciudad patagónica.
La minera canadiense está estudiando la factibilidad del proyecto metalífero emplazado en Santa Cruz. La construcción, que se lanzaría a fines de 2014, demandará entre u$s 300 y 400 millones.
Yamana Gold es una minera canadiense que concentra la mayor parte del porfolio de negocios en América Latina, con exploración y mineras operativas en Chile, Brasil, Perú, México y la Argentina, entre otros países de la región. “Estamos cómodos en el continente, conocemos el ambiente, la geología, la política y las relaciones públicas del sector, que tiene un potencial muy grande”, destacó Darcy Marud, Senior VP de Exploración de la compañía.
El directivo advirtió que a la empresa le llevó un tiempo entender la dinámica interna de la Argentina, pero ahora “ve muy bien” la industria minera en el país. “No es ningún secreto que la Argentina es un poco diferente de otros países de la región. Pero cada mercado tiene sus particularidades. Nosotros tenemos historia operando en Gualcamayo (una mina de oro y plata en San Juan), por lo que estamos bastante cómodos operando en San Juan”, señaló el ejecutivo canadiense en perfecto español, una de las marcas de su paso profesional en Chile.
En Gualcamayo, que produce cerca de 200.000 onzas de oro equivalente por año, Yamana está encarando este año la explotación subterránea de la mina a fin de elevar los niveles de extracción. En tanto que en Cerro Moro, un yacimiento de plata y oro en Santa Cruz, a 70 kilómetros (km) de Puerto Deseado, la empresa con sede en Toronto está avanzando con los estudios de factibilidad para lanzar la construcción de la mina.
Marud advirtió, sin embargo, que el inicio de las obras “recién se concretará a fines de 2014 o a inicios de 2015”.
“En San Juan ya hemos pasado por el proceso de poner el yacimiento en producción, mientras que en Santa Cruz estamos aprendiendo lecciones de otras empresas mineras que operan en la provincia”, explicó el directivo en diálogo con El Inversor Energético & Minero, que lo entrevistó durante la feria PDAC 2013, que se realizó en Toronto en marzo.
La construcción de Cerro Moro –agregó– demandará entre u$s 300 y 400 millones y estará operativa en la primera mitad de 2016. El directivo negó que existiesen dificultades para girar utilidades al exterior. “No es una complicación. El Gobierno ha establecido un reglamento sobre el tema (en rigor, no existe ninguna resolución oficial), pero mientras uno pueda explicar la posición y entienda la necesidad del Gobierno, todo funciona bien. No es el mejor mecanismo, es cierto, pero es el sistema en el que estamos trabajando ahora”, explicó Marud. Sin embargo, manifestó su preocupación por el avance de la inflación sobre los costos. “La inflación es muy preocupante, pero en el potencial minero de la Argentina ofrece un premio que es mucho mejor que el riesgo. Lo vemos desde ese punto de vista”, destacó.
Más reservas
En febrero Yamana anunció un aumento del 44% de los recursos metalíferos de Cerro Moro. La compañía informó que los recursos minerales en el reservorio ascienden a 1,95 millones de onzas de oro equivalente. En total, Cerro Moro cuenta con recursos por 4,16 millones de toneladas (Tn), con una ley de corte promedio de 14,6 gramos de oro equivalente por Tn.
Yamana evalúa extraer alrededor de 1.000 Tn/día de Cerro Moro, de las cuales un 70% se producirán en forma subterránea, mientras que el 30% restante se explotará a cielo abierto por medio de un open pit. La minera apunta a obtener cerca de 200.000 onzas de oro equivalente (GEO) por año.
La compañía desembolsó u$s 12 millones para perforar este año 25.000 metros exploratorios a fin de expandir el área de mineralización del yacimiento. El programa exploratorio estará focalizado en testear ocho objetivos principales ubicados en el bloque La Negrita, al norte de Cerro Moro. En esa área, la minera descubrió en enero la veta Margarita, una nueva zona de mineralización. También se realizarán perforaciones en el bloque Escondida, al sur del reservorio, para testear anomalías geotérmicas y geológicas. En 2012, la empresa invirtió u$s 5 millones para perforar 100 pozos exploratorios en Cerro Moro.