El portazo en masa, según el sindicalista, lo pegó primero él como secretario general. Luego adhirieron los demás miembros de la comisión (Agüero, Malla, Cruz, Muñoz, Ortíz, Nolasco Lucero, Irrazábal, Pastén, Zárate y Pérez). “Se plegaron a mi decisión porque lo que debe primar es la unión”, dijo Angel.
Así , AOMA quedó acéfalo. Ayer esperaban la llegada de un delegado normalizador desde la sede central, para que llame a elecciones en no más de 120 días. Angel recalcó que no se trata de un interventor. “A mí no me renunciaron, yo renuncié solo”, aseguró, en referencia al contrapunto con Buenos Aires. El líder gremial nacional, Héctor Laplace, había dicho el martes que no está enojado con Angel, pero ayer el sanjuanino mencionó que “hay un malestar nacional, según ellos”. Y apuntó que recibieron críticas en el último congreso ordinario en Tandil. De todos modos, Angel argumentó su renuncia, fechada el 17 de este mes, en problemas de salud.
Según Angel, en la decisión “no influyó para nada OSMA, que no sé si algún día le den la personería gremial, cosa que no creo. No se formó con gente que era de nuestro gremio”. Agregó que “hemos superado muchísimos avatares en nuestra labor y no tenemos problemas de resentimientos