Es cercano al paso a Chile. Así lo determinó un grupo de expertos de la UNSJ que lo midió en 1997 y a principios de este año, determinando que perdió un tercio de su masa de hielo, debido al calentamiento del planeta. La constatación científica se produce mientras el gobierno nacional vetó una ley para proteger los glaciares y junto a algunas provincias encabezadas por San Juan, quieren introducirle cambios para favorecer a las empresas extractivas.
San Juan, Argentina – 12/04/09. Es el de Agua Negra, cercano al paso a Chile. Así lo determinó un grupo de expertos de la UNSJ.
Fuente: Diario de Cuyo
Un estudio realizado por profesionales de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) dejó una amarga conclusión: Un glaciar medido en 1997 y a principios de este año, perdió un tercio de su masa de hielo, debido al calentamiento del planeta. Esto enciende una luz roja para estos recursos hídricos, ya que hace inferir que el resto de los cuerpos de hielo podría estar sufriendo el mismo deterioro. Se trata de glaciares ubicados a lo largo de la cordillera de Los Andes, y que en San Juan son vitales como recurso de agua de la gente y para la economía de la provincia.
La constatación científica se produce mientras el gobierno nacional vetó una ley para proteger los glaciares y junto a algunas provincias quiere introducirle cambios para favorecer a las empresas extractivas, aunque estos estudios de nivel universitario vienen realizándose desde hace tiempo.
El grupo de geólogos y geofísicos investigó el glaciar Agua Negra, ubicado cerca del paso que lleva el mismo nombre, en el departamento de Iglesia; y las mediciones que allí se hicieron eran la parte práctica de un curso de glaciares áridos, de nivel de postgrado.
Se eligió el glaciar de Agua Negra porque a pesar de su altura (4.750 metros), es el más accesible de San Juan; pero además, porque ya contaban con un estudio realizado en 1997 de sus características, lo cual iba a permitir compararlo.
Ese año se determinó que el espesor de hielo del Glaciar Agua Negra variaba entre 20 y 50 metros, con un espesor medio entre 35 y 40 metros. Por ejemplo, los glaciares Toro 1, Toro 2 y Esperanza -del proyecto minero Pascua Lama-, en Chile, tienen en promedio 10 a 12 metros de espesor y son mucho mas pequeños en área.
La tarea se realizó con radares que a través de ondas miden el espesor del hielo. Así se determinó que desde 1997 al 2009 el glaciar Agua Negra perdió 13,9 metros de espesor en un punto determinado, el mismo tomado como referencia hoy y hace 12 años.
Esto significa que si se prorratea el volumen en el tiempo transcurrido, el glaciar está perdiendo 1,15 metros de hielo por año.
“Los datos no mienten. Al principio pensábamos que no podíamos detectar la base del glaciar, que sabíamos que estaba cerca de los 30-35 metros. Eso en nuestra pantalla se hubiera visto como una onda reflejada a 300-350 nanosegundos. Finalmente, luego de varias pruebas, nos convencimos que estábamos viendo el eco que producía la base, pero en vez de 300 nanosegundos estaba en el rango de los 150 nanosegundos, casi la mitad que el registro de 1997”, explicó Juan Pablo Milana, doctor y especialista en glaciares a cargo de esta cátedra de postgrado.
¿Qué es un nanosegundo? Es la milmillonésima parte de un segundo y se mide el tiempo que tarda en viajar un pulso de radar desde el transmisor a la base del glaciar.
Más pruebas
Milana explicó que en las fotos se ve perfectamente como disminuyó el límite del glaciar en estos 12 años, pero si sólo se mide el límite, el achicamiento sería del 10%. En cambio si se prorratea la pérdida de espesor por el resto del glaciar (ya que la perdida de hielo es menor a mayor altura), éste ha perdido casi un tercio de su masa total.
“La estimación de volumen utilizando el perímetro del glaciar es muy errónea ya que subestimó tres veces menos la perdida total de hielo del mismo. El seguimiento del frente sirve para saber que el glaciar se esta desgastando desde hace varias décadas”, aseguró Milana.
Otras evidencias: En el 1997 el frente de hielo formaba un paredón de unos 8 metros y caía directamente sobre el lago periglacial, mientras que hoy está bastante separado del frente de hielo.
El futuro es más nefasto aún: En función de la historia reciente y según los hallazgos en el Glaciar de Agua Negra, el grupo predijo que éste desaparecerá en unos 30 años, si el clima se mantiene tal como ahora.
“Desafortunadamente esta evolución es irreversible. La única que puede cambiar el triste destino de estos glaciares es la madre Naturaleza”, destacó Milana con una resignación que no tiene en cuenta la acción del hombre.