La minería a gran escala es una piedra que incomoda en el zapato de cualquier dirigente político. Constituyó un factor decisivo que aceleró el fin del predominio electoral de la UCR en Chubut, cuando José Luis Lizurume se abrazó al emprendimiento prometido en Esquel como un salvavidas, en plena crisis de 2001–2002. Cada gobernador cuidó su verba y sus acciones sobre la cuestión al llegar a Fontana 50. Mario Das Neves tuvo pies de plomo en 2003, y ahora se muestra cauteloso mientras manda a sus ministros a lanzar globos de ensayo ante el avance casi militar de Pan American Silver. La fascinación de la compañía canadiense por el Proyecto Navidad es comprensible: en su sitio web remarca que produjo hasta ahora un total de 26.12 millones de onzas de plata, pero el yacimiento chubutense le aportaría 22 millones de onzas de plata por año.
Por Pablo Quintana publicado en El Extremo Sur
Ni el bajo nivel de precios de los minerales ni la prohibición legal vigente en Chubut disuaden a la empresa canadiense, sobre todo a partir de la eliminación de retenciones para el sector decidida por el gobierno de Mauricio Macri, quien impulsa fuertemente la actividad tal como lo hiciera el kirchnerismo.
Más allá de sus posiciones discursivas y sus argumentaciones ante la prensa, todos los mandatarios –cada uno a su manera– no dejaron de lanzarle guiños evidentes a la corporación minera.
Lo hizo Martín Buzzi cuando procuró avanzar con las modificaciones en el marco regulatorio. La resistencia de las organizaciones sociales chubutenses le pusieron los puntos sobre las íes, y él prefirió archivar la cuestión. En ese momento la Legislatura avanzó sólo con la regulación de las actividades hidrocarburíferas y se abstuvo de modificar el cuadro para las mineras.
Mientras la dirigencia política intenta encontrarle la vuelta a las controversias y al rechazo social para no pagar los costos políticos que le puedan hacer perder la supremacía en el juego del poder, aún sigue pendiente el proyecto de la Iniciativa Popular que fue presentado por la Unión de Asambleas Ciudadanas en 2014.
Ese episodio resulta bochornoso para la institucionalidad chubutense, y nunca terminó de ser saldado totalmente.
Últimos movimientos
El veto de la Ley 075/14 firmado por Das Neves resultó un paso adelante y un indicio positivo, pero el tratamiento de la Iniciativa Popular sigue sin llegar a la Casa de las Leyes. El proyecto –como se sabe– busca impedir que en el territorio provincial se ejecuten cateos, exploraciones y explotaciones mineras metalíferas y de radioactivos.
Ya son cuatro los municipios que se pronunciaron a favor de que la Legislatura brinde tratamiento al proyecto de ley presentado. Si se concretara, sería posible ejercer el derecho constitucional que avalaron más de 13 mil firmas.
Esquel lo concretó en diciembre del 2014 –ver entrevista al intendente Sergio Ongarato en esta edición. Corcovado lo requirió en marzo de 2016, en mayo del año pasado lo hizo Puerto Pirámides y hace muy poco, en septiembre, lo solicitó el Concejo Deliberante de Rawson.
Chubut cuenta con una mancha significativa en su vida institucional a partir de ese suceso –digno de las grandes escenas de connivencia político-empresaria– en el cual la imagen del celular del ex diputado provincial justicialista Gustavo Muñiz mostraba las instrucciones de Gastón Berardi, directivo de Yamana Gold. La evidencia no requiere confirmaciones.
La reunión y la embestida
Ahora vuelve a cambiar la escenografía, pero no los objetivos ni las prácticas, que en todo caso se adaptan con pretensiones de marketing.
Tras el encuentro del gobernador Mario Das Neves con el presidente Mauricio Macri y los directivos de Pan American Silver, la embestida minera toma oxígeno y retorna con vigor a la escena política de Chubut.
Das Neves sostuvo que les advirtió a los mineros que todo lo que tiene que ver con el cianuro y el cuidado del agua sigue siendo un impedimento. Luego de recordar la vigencia de la ley 5001, el gobernador reiteró que “es la ciudadanía la que tiene que definir”, aunque hasta el cierre de esta edición no especificó cómo ni cuándo.
La multinacional anunció una inversión de mil millones de dólares en el Proyecto Navidad y redobló las apuestas a su manera. Ahora propone dejar de lado ese miserable 3% como lo establece la ley para ascender “generosamente” a un 16%. “Es un número –disparó Das Neves-, pero podemos hablar de 20 o 25% también”. Es evidente que el cuidado de los bienes naturales dejó de ser el eje de la discusión, que pasó a ser una cuestión de potencial rentabilidad real para la provincia.
Habrá que ver si Das Neves prioriza su capital político en las zonas antimineras –la Cordillera fue decisiva para él en la elección de 2015– y la imagen de defensor de los derechos federales que busca fortalecer –como hizo con su oportuna presentación del amparo por el tarifazo macrista al gas–; o se deja llevar por la angustia que le provocan las cuentas provinciales, que lo pueden llevar a la búsqueda de recursos cueste lo que cueste.
¿Pan American Cianuro?
La multinacional sabe que es un momento propicio, ya que cuenta con el aval explícito el gobierno nacional. Por eso promete, no usar agua potable ni tampoco cianuro. Sin embargo, el tema sigue siendo una fuente de contradicciones para el propio sector.
Martín Carotti, uno de los consultores mineros relevantes en Latinoamérica, afirmó que el proyecto Navidad usará el compuesto químico. Carotti escribió en su Facebook: “Argentina, no reniegues del cianuro, si la minería sin cianuro es buena, cuando haya otro proyecto en Chubut, incluso de la misma empresa, que lo necesite, ¿va a ser malo? Y recordemos que se usan sales de cianuro en la flotación de plata. ¿De qué se van a disfrazar para dar explicaciones cuando aparezca en los medios la foto de un tambor de sal de cianuro en Navidad?”.
¿El dasnevismo ha cambiado?
¿El dasnevismo seguirá siendo el mismo que allá por 2011 sugería reevaluar la vigencia de la ley 5001? ¿Das Neves será el mismo que en la apertura de sesiones de 2010 mencionó a la minería a gran escala como una actividad necesaria para desarrollar las comunidades?
En ese momento, el gobernador habló de comarcas degradadas, víctimas de la desertificación, y sostuvo: “recuperarlas implica un esfuerzo económico que es imposible llevar a cabo sin utilizar sus recursos”.
En aquel momento no smencionaba la posición ante el cuidado del agua, no importaba el cianuro y mucho menos las regalías. “Es indispensable establecer en la meseta central, políticas que aseguren la producción y el trabajo para asegurar el arraigo (…), tenemos que desarrollar la explotación de los recursos mineros”, afirmaba entonces Das Neves.
En este tercer mandato, el gobernador ha mostrado significativos cambios metodológicos y de actitud en algunas áreas de gobierno. ¿En el tema minero cederá a la lógica extractivista o elegirá la búsqueda de consenso que le permita en el futuro caminar por las calles de la provincia como no puede hacer Lizurume, por ejemplo?
Suele suceder que cada uno de estos globos de ensayo se lanza hacia la sociedad intentando medir el humor colectivo. La tan meneada licencia social sigue sin aparecer. Ahora, quien marcó los tiempos fue el sector minero y con la anuencia de Nación.
Los fusibles del Jefe
El gobernador se guardó y quienes aparecen en escena son los hombres que lo acompañan en la gestión. El más desenfadado fue el ministro Coordinador de Gabinete, Víctor Cisterna, quien asume el papel de alentar el debate y preparar a la sociedad para el “pinchazo” de las mineras.
Cisterna fue mucho más allá, atreviéndose a formular una posición desenfadada y provocativa. El ministro coordinador –haciendo de “policía malo”– se preguntó: “cómo es posible que un chico de 6 años lo primero que dice es ‘no a la mina’. ¿Cómo le llegó esto? ¿Por qué? Se instalan preconceptos y luego no se razona”. Los dichos del funcionario impulsaron la enérgica respuesta de numerosos docentes de distintos puntos de la provincia.
Docentes universitarios, de escuelas secundarias y primarias le salieron al cruce. “Queremos explicarle al Ministro Cisterna que su visión adoctrinante de la educación, como una práctica que “mete” ideas en las cabezas de seres que deberían o podrían ser llenados como alcancías, resulta totalmente inapropiada y obsoleta. En todo caso, las / los niñas / os chubutenses poseen y utilizan muchos conceptos sobre la megaminería y su peligrosidad, que se han construido con gran cantidad de información e investigaciones científicas. Invitamos al Ministro a que vea los manuales de Educación Ambiental que el mismo Ministerio de Educación de Nación había publicado en 2011, pero luego prohibió debido a las presiones ejercidas por funcionarios cercanos a las corporaciones mineras”, le escribieron.
Ni una buena para la minera
La minería a gran escala no ha tenido buenas noticias en Chubut. Hace poco el Superior Tribunal de Justicia confirmó que Minas Argentinas, subsidiaria de Yamana Gold Inc., no puede tener una sede comercial en Esquel. El STJ le advirtió a la compañía que un local de esas características podría ser “el cerebro de una empresa cuya actividad está prohibida”.
Hasta el agente de la Agencia Federal de Inteligencia quedó en evidencia después de espiar a vecinos, abogados, periodistas y docentes que militan en contra de la actividad extractiva.
Cabe recordar que el Juzgado Federal de Esquel procesó al “topo” por realizar espionaje ilegal en el marco de una causa por terrorismo contra una comunidad mapuche.
La aparición de las comunidades originarias reclamando su territorio y en defensa del mismo es un actor que complica los sueños mineros de los avariciosos empresarios.
En setiembre se llevó a cabo en Gan-Gan un trawn –parlamento– de las comunidades mapuche-tehuelche de la Meseta Central Norte. Integrantes de las comunidades Mallín de los Cual, Los Pino, Laguna Fría y Chacay Oeste, Sierras de Huancache, Pichi Leufú, Lagunita Salada, Gorro Frigio, Cerro Bayo, Blancuntre y Yala Laubat deliberaron en el corazón del conflicto.
Denunciaron la falta de realización del Relevamiento Territorial, uno de los principales impedimentos para lograr los tan ansiados títulos comunitarios.
Sabedores de la importancia que tiene el acuífero de Sacanana, esa cuenca descubierta no hace demasiado entre las localidades de Gan Gan y Gastre –contendría agua para abastecer a 300.000 personas durante 320 años, según las estimaciones– reclamaron que se declare como bien natural, común y público toda el agua dulce disponible en el territorio de los pueblos originarios como en toda la Provincia. Reiteraron, una vez más, que la meseta no es zona de sacrificio.
Pan American Silver / perfil
Pan American Silver se define como “la segunda empresa productora primaria de plata en el mundo, creando valor a través de la excelencia en el descubrimiento de yacimientos, la ingeniería, la innovación y el desarrollo sostenible”. En su sitio panamericansilver.com remarca que produjo hasta ahora 26.12 millones de onzas de plata y 183.7 miles de onzas de oro.
Fundada en 1994, tiene sede en Vancouver (British Columbia, Canadá) y se dedica a la exploración, adquisición, desarrollo y operación de minas de plata. Posee siete minas que producen en Argentina (Manantial Espejo, Santa Cruz; y Calcatreu, Río Negro), Bolivia, México y Perú. Detenta los derechos de los proyectos Navidad (Argentina) y La Preciosa (México). La plata representa aproximadamente el 50% de sus ingresos, aunque explota además minas de cobre, oro, plomo y zinc. En 2012 adquirió Minefinders, también canadiense.
Proyecto Navidad
Pan American Silver anunció el pasado 14 de septiembre que planea invertir u$s 1000 millones en el Proyecto Navidad, la mina de plata ubicada en Chubut. El presidente de PAS, Ross Beaty, lo confirmó durante la reunión que tuvo con el presidente Mauricio Macri en el Foro de Inversión y Negocios.
El Proyecto Navidad –considerado la reserva de plata más grande del mundo– está suspendido desde 2003 por la ley provincial de Chubut que prohíbe la minería a cielo abierto y el uso de cianuro para la extracción. La firma presentó informes de viabilidad y factibilidad, pero las leyes provinciales no le permiten avanzar en la exploración.
El Proyecto Navidad –su denominación nace de que las primeras pruebas de laboratorio exitosas se obtuvieron un 25 de diciembre– se ubica en Gastre, en la meseta central de Chubut. Posee una extensión de 10.000 hectáreas.
Según la propia PAS -que adquirió los derechos en 2010- su explotación le permitiría obtener 22 millones de onzas de plata por año