El Foro Ambiental y Social de la Patagonia como organización que trabaja hace más de 8 años de manera ininterrumpida en la ciudad de Comodoro Rivadavia y el Lof Cushamen expresan ante el Comité de Cuenca del Senguerr que existen diversos pensamientos y saberes en nuestro territorio que enriquecen el concepto AGUA tal como lo conocemos en la sociedad occidental.
Por Foro Ambiental y Social de la Patagonia
El mismo se construye a partir de la interrelación con formas de vida y se convierte en un ser complejo con aristas no sólo económicas y sociales sino también filosóficas y espirituales que han sido reconocidas desde el estado argentino desde lo jurídico aunque no así desde lo político.
En este marco este comité no sólo desoye a parte de su comunidad, sino que no respeta a una sociedad diversa, a un mundo dinámico y cada vez más consciente de que el agua no sólo escasea, sino que es condición necesaria para la VIDA, presente en nuestro cuerpo, en nuestro entorno, en nuestra cultura.
En estos años hemos aprendido que el agua es un ser indivisible al que lo han simplificado catalogándolo de potable o de uso industrial, de recurso estratégico e insumo para los grandes usuarios, convirtiéndolo simplemente en una mercancía, que hasta en esos términos, con el tiempo será irrecuperable.
Esto nos lleva a pensar que en este sistema donde nos encontramos inmersos, hablamos en distintos lenguajes y muchos de nosotros no nos vemos reflejados en las decisiones y acciones que surgen de esta institución.
Para esta sociedad no existe la participación franca y abierta sino que siempre es limitada a los grupos económicos fuertes, y de alguna manera la nuestra es una participación forzada por quienes nos preocupamos por buscarla, a pesar de que Ley XVIII N° 74 en su art. 4° inc a indica que los órganos de gobierno de los comités de cuenca deben asegurar la participación de las comunidades.
Los entes estatales crean leyes y procesos administrativos que niegan nuestra participación plena, crean cargos y autoridades con las cuales no podemos dialogar, crean espacios y redes de comunicación a los cuales no podemos acceder masivamente.
Sin embargo quienes somos invisibilizados existimos, exigimos ser escuchados y exigimos que respeten nuestros derechos.
¿Tienen conciencia de que sus decisiones implican nuestra supervivencia?
Pues pareciera que no.
Como dijimos las cuencas hidrográficas son indivisibles, lo que hagan en su origen determina la vida a lo largo y al final de su recorrido. Contaminar bajo tierra, implica también matar lo que está en la superficie.
Y no hablamos sólo de una cuestión biológica actual egocentrista, hablamos de pueblos con historia, con identidad cultural y ancestral y de otros seres vivos que comparten nuestro entorno que hoy han comenzado a tomar relevancia desde el punto de vista jurídico en lo que se ha dado en llamar los “derechos de la naturaleza”.
Todo ello significa que estamos interrelacionados y por ende implica nuestra subsistencia.
Sin embargo y a pesar de la urgencia y trascendencia de la problemática, las/los vecinas/os adolecemos de falta de información y no se nos consulta a pesar de ser los afectados por sus políticas.
El responsable directo de las decisiones que se llevan adelante es el Ejecutivo Provincial.
Deben garantizarnos el ejercicio del derecho a participar, caso contrario pueden incurrir en responsabilidad internacional por violación de derechos humanos (Art. 75.22 de la Constitución y particularmente Art. 33.1 de la Convención Americana de Derechos Humanos)
Por ende exigimos una democracia participativa… pero real, no la que frustró la iniciativa popular que elevó el proyecto de ordenanza “EL AGUA COMO DERECHO HUMANO, BIEN NATURAL, COMÚN Y PÚBLICO”, y que a pesar de haber obtenido más de 3000 firmas exigidas por la normativa local, ni siquiera se trató en el Concejo Deliberante de Comodoro Rivadavia.
Queremos una democracia que si es representativa no nos mienta. Afirmar que no tendremos agua por el uso indiscriminado de los productores de Sarmiento, omite la histórica demanda de los miles de pozos petroleros que se abastecen entre Sarmiento y Comodoro, e inclusive en el denominado “Codo del Senguerr” desde hace varias décadas.
¿Qué resultados arrojan los análisis de agua de las operadoras que son obligatorios conforme al Decreto 1567/09?
¿A dónde están las investigaciones y sanciones ejemplificadoras para estos grandes usuarios por el daño al ambiente sano y a los derechos humanos a la vida, al acceso al agua potable y saneamiento?
Estas son sólo algunas preguntas que realizamos hace un par de años al Instituto Provincial del Agua y que aún no han sido respondidas.
Las futuras generaciones no se alimentarán con petróleo porque otras energías se están desarrollando, lo harán con el fruto del trabajo de los agricultores y ganaderos, si es que queda algo de agua.
En conclusión ante este panorama y con respecto a los puntos oficialmente conocidos hasta el momento:
• No avalamos la realización de ningún acuerdo para el uso de aguas en territorio binacional por falta de información, de estudio de Impacto Ambiental y de consulta masiva a los pueblos que se verán afectados por este proyecto.
• Ante la inminente construcción de represas en Lagos Fontana y Musters apelamos al principio precautorio con el fin de reducir dudas, a la búsqueda de consensos para evitar daños irreversibles en los ecosistemas y demandamos profundizar el para qué y para quienes están pensados estos emprendimientos.
• Nos oponemos a la colocación de los medidores de agua domiciliarios ya que esto implica la privatización del agua y por ende la vulneración al libre acceso de las poblaciones al agua potable, en particular a los sectores más desprotegidos.
• Hacemos un llamado a la comunidad universitaria y científica de la región que ante la necesaria actuación que tienen por su conocimiento técnico, revelen una ciencia en favor de la comunidad y no en beneficio de sus contratantes.
Por todo lo antedicho pedimos la impugnación de esta asamblea y que conste en actas.