El resultado de una investigación interdisciplinaria de un grupo de profesionales, indican que el agua de Tinogasta, tanto superficial como subterránea, tiene altos índices de los minerales boro, uranio y arsénico, que se encuentran en estado natural tanto en aguas de riego como en agua para consumo humano. El trabajo refuerza los argumentos contra la instalación de emprendimientos mineros.

Ver también: 

Fuente: El Ancasti

El grupo de trabajo de Investigadores Populares sobre la Problemática Minera (IPPM), becarios de la Universidad Buenos Aires (UBA), brindaron los resultados de una investigación realizada desde 2010 a 2012 con muestras de campo y análisis de agua.

El equipo constituido por María Comelli (socióloga), Alan Szalai (químico) y Paula Rosin (bióloga), presentaron un informe días pasados de su trabajo relacionado con el impacto que podría llegar a tener la instalación de un proyecto de uranio a 8 kilómetros en línea recta del centro de Tinogasta.

La presentación se hizo en el salón del Colegio Sor Pierina, frente a la plaza, donde asistió un importante número de personas y funcionarios.

Los profesionales informaron que las muestras se hicieron respetando el protocolo de captación y traslado. Una toma en invierno y otra en verano en 2012 en el centro, barrios, márgenes de río y acequias de riego.

En este sentido, los investigadores dijeron que las principales patologías que se presentan por la presencia de estos minerales están relacionada con enfermedades renales, y “esto nos pareció interesante remarcar porque estando en contacto con médicos de la ciudad nos comentaron que hay muchos casos. También puede estar vinculado con problemas de fertilidad masculina y con problemas en fetos”.

Por otro lado, también confirmaron que “las aguas superficiales, subterráneas y de red están conectadas en distintas épocas del año entre sí y de esta manera el agua para riego está contaminada con boro y este río puede llegar a contaminar el agua para consumo”.

Finalmente concluyeron que la intención es que todos los tinogasteños conozcan la calidad de agua que tienen y a lo que pueden llegar si permiten la instalación de emprendimientos mineros.