Los gobiernos de Argentina y China esta semana firmaron acuerdos de financiación para la construcción de la cuarta y quinta central nuclear, que significarán una inversión total de 16.000 millones de dólares. Los especialistas analizan los costos de inversión inicial, mantenimiento y mano de obra, destacando la conveniencia de avanzar en proyectos de energías limpias. Cuestionaron duramente la decisión de construir la cuarta y quinta central nuclear que, sumadas, aportarán apenas 1.700 MW de potencia además del hecho de que aumentar la deuda externa es aumentar el extractivismo.
Fuente: Energía Estratégica
Los gobiernos de Argentina y China avanzaron esta semana en la materialización de acuerdos destinados a la construcción de la cuarta y quinta central nuclear, que significarán una inversión total de 16.000 millones de dólares, financiados en un 85 por ciento por parte del gigante asiático. Fueron rubricados por el presidente de Nucleoeléctrica Argentina (NASA), José Luis Antunez; y el titular de la firma nuclear china CNNC, Quian Zhimin.
¿Cuánta potencia de energía renovable se podría instalar con este capital? Según indican los expertos locales, en el caso de la energía eólica, la cifra oscila entre 8.000 y 8.600 MW, casi 5 veces más de la capacidad que sumarán las dos centrales nucleares. Es el equivalente a instalar 100 parques como el de Rawson, Chubut, administrado por la empresa Genneia S.A.
“Para ir más al punto concreto, solamente con decir que esa potencia eólica se podría instalar en un plazo de entre 5 y 6 años, entregando energía desde los primeros parque eólicos conectados a la red, aumentando el rendimiento año a año. La nuclear, además de tener un mayor plazo de construcción, no entregaría energía hasta tanto se termine la instalación”, explica un reconocido experto del sector que prefirió no ser citado en la nota.
En la misma línea se manifestó Pablo Bertinat, referente del Observatorio de Energía y Sustentabilidad, docente de la Universidad Tecnológica Nacional de Rosario, máster en sistemas humanos ambientales e ingeniero eléctrico, cuestionó duramente la decisión del Gobierno de avanzar en dos convenios por centrales nucleares.
“Lamentable decisión de seguir profundizando el sector nucleoeléctrico. En momentos en que se debiera profundizar el debate y minimizar los riesgos, esta medida hipoteca nuestra salud, nuestra economía y nuestra seguridad por muchos años. En un juego de suma cero. Gastar 16.000 millones de dólares en dos centrales nucleares sin dudas es definir que la prioridad no son las fuentes renovables de energía. La deuda con China es extractivismo para los próximos años”, sostuvo.