Por primera vez una petrolera es condenada a indemnizar a una familia de Texas, EEUU, por los daños que les produjo la proximidad a sus pozos de extracción de gas mediante fractura hidráulica (fracking). Hace tres años, Lisa Parr empezó a padecer migrañas y vómitos. Pronto entendió que su malestar se debía a la veintena de pozos para la extracción de gas que rodean su casa, en Decatur, Texas, y que explota Aruba Petroleum. Su marido, Robert, y su hija, Emma, también debieron pasar numerosas veces por el hospital.

Fuente: Buen Diario

Ese mismo 2011, la familia Parr demandó a la petrolera Aruba Petroleum y ahora, por primera vez, un tribunal condenó a la empresa a indemnizar con 2,9 millones de dólares a la familia y a reconocer públicamente que sus prácticas son dañinas para la población y el suelo.

Se trata de la primera indemnización millonaria por un caso de afectación a la salud relacionado con el fracking, la controvertida técnica de extracción de gas natural y petróleo que genera innumerables dudas medioambientales. También se la conoce como fracturación hidráulica, y consiste en inyectar en el subsuelo agua a presión mezclada con arena y sustancias químicas para liberar el gas que se encuentra atrapado en la roca. La técnica se extendió por Estados Unidos durante la presidencia de Obama y son numerosos los conflictos sociales y medioambientales que suscitó pero nunca antes había intervenido un tribunal a favor del pueblo.

El caso de los Parr llegó a juicio y un jurado popular dio la razón a la familia por cinco votos a favor y uno en contra. La indemnización responde a pérdida de valor de la propiedad, futuras consecuencias para su salud, daños psicológicos y problemas médicos causados hasta ahora. La familia Parr alegó en su demanda que las operaciones de Aruba Petroleum en las inmediaciones de su vivienda contaminaron el ambiente haciendo enfermar a su familia y a su ganado y forzándoles a mudarse a otra localidad. Se sospecha que el fracking implica el uso de componentes cancerígenos – como el benceno – y de alteradores del equilibrio hormonal, relacionados con la infertilidad, de ahí la importancia de este antecedente legal.

La resolución de la demanda de los Parr puede abrir paso a nuevas reclamaciones similares y convertirse además en un argumento a favor de los que rechazan esta práctica, o incluso que la Administración Obama elabore nuevas regulaciones que ajusten las actividades de estas empresas. La legislación medioambiental en Europa es mucho más estricta que en Estados Unidos y está más regulada la inyección de productos químicos tóxicos en pozos. De cualquier manera, el fracking es un tema problemático a nivel mundial, es muy bueno que ahora haya un antecedente legal que facilite la lucha de quienes eligen proteger a la salud de la tierra y sus habitantes antes que el rédito económico de unos pocos.