La Plataforma pola defensa de Corcoesto reclama a la Comisión Europea que prohíba la norma porque prevalecen las actividades extractivas frente a la protección de la naturaleza. Denuncian que el proyecto autonómico abre la puerta a los intereses económicos y especulativos.
Fuente: La Opinión A Coruña
¿Cómo puede una normativa permitir la minería a cielo abierto en un espacio de la Red Natura? Esa es la pregunta que se hacen la Plataforma pola defensa de Corcoesto e Bergantiños y las asociaciones de vecinos de las localidades de Cereo y Valenza. Por eso han presentado una denuncia ante la Comisión Europea (CE) contra el Plan Director de la Red Natura que aprobó la Xunta a finales de marzo, en el que prohíbe la apertura de nuevas explotaciones mineras en zonas protegidas pero deja “vía libre” para ampliar o modificar las ya existentes.
El colectivo alerta de que el plan director del Gobierno gallego -que llega con cuatro años de retraso después de que expirara el plazo dado por la UE para presentarlo- supone la “total libertad” de acción para llevar a cabo actividades extractivas a cielo abierto sobre territorios de la Red Natura y por tanto prevalecen estos usos frente a la conservación de áreas “hasta ahora protegidas” como las 59 Zonas de Especial Conservación (ZEC) y las 16 Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA). La norma permite nuevos aprovechamientos mineros en territorios considerados con potencial minero por el Plan Sectorial de Actividades Extractivas (pendiente de elaboración) o que queden incluidas en “un ayuntamiento minero”, del que no hay ningún ejemplo en Galicia.
La organización considera que la normativa autonómica es “una sinrazón y un peligro” en lo que se refiere a la defensa de la conservación de la naturaleza que promueve la Red Natura y que además abre las puertas a la legalización encubierta de decenas de explotaciones que en la actualidad funcionan de manera irregular. Desde el colectivo ven una contradicción en que el decreto de la Xunta permita una actividad “tan agresiva con el medio natural” como la minería a cielo abierto en un espacio protegido “en perjucio de la biodiversidad” y que “vulnera” el “espíritu” de la normativa comunitaria. En su opinión, detrás de la reducción del nivel de protección existe una intención de colocar determinados espacios “al servicio de la especulación” porque -señalan- hay territorio suficiente que no está protegido para llevar a cabo este tipo de iniciativas empresariales. En este sentido, la Plataforma pola defensa de Corcoesto e Bergantiños añade que hay casos en los que aunque la evaluación ambiental sea negativa se autorizan usos mineros en exclusiva por razones económicas.
Con esta denuncia, la asociación espera una actuación rápida por parte de Bruselas para que impida lo que consideran “un despropósito de la Xunta que pone en peligro la conservación del patrimonio ecólogico-ambiental de la comunidad”.