La publicación esta semana de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto minero de Salave (Tapia), ha reavivado la polémica en torno al yacimiento de oro que pretende explotar Asturgold, con lo que asegura que creará unos 800 empleos durante la construcción de la mina y 250 directos durante los años que se explotaría, además de otros 250 indirectos, según las estimaciones de la empresa.

Fuente: La Voz de Galicia
A favor. El pasado día 11 de noviembre, centenares de personas se manifestaban en la plaza de Tapia a favor del proyecto de Asturgold, convocados por la plataforma Mina ya, Trabajo si. PEPA LOSADA

En contra. En los últimos años han sido numerosos los actos en contra de la mina, promovidos por ecologistas y por Oro No, como esta manifestación del año 2000, en los lagos de Salave.

A principios de esta semana la plataforma Oro No hacía público un comunicado expresando sus «sospechas y desconfianza» porque a pesar del tiempo transcurrido desde que la Comisión para Asuntos Ambientales del Principado informase favorablemente la declaración de impacto ambiental (fue el 27 de noviembre del 2012), casi dos meses después aún no se hubiese publicado ni notificado a los interesados.

Oro No lanzaba la hipótesis de que se pudiesen estar introduciendo modificaciones. En todo caso, advertía: «La asociación Oro No se reafirma en su intención de ejercer todas las acciones judiciales para impedir que este proyecto -ilegal e inasumible- se lleve a cabo».

Lo curioso es que dos días después, el DIA se publicaba en el Boletín Oficial del Principado y la Coordinadora Ecoloxista de Asturias salía a escena para denunciar la «ilegalidad» del Principado por algo que ya era conocido: declarar como favorable el impacto ambiental de parte de las instalaciones pero no así de la planta de tratamiento y del depósito de estériles, entre otros elementos de la mina, dejando en manos de Asturgold presentar alternativas.

Para la coordinadora el proyecto, al ser uno solo, debería haberse denegado en su totalidad. Y concluía: «Quedan todavía muchos trámites administrativos para legalizar parte del entramado especulativo de la mina de Salave».