Al grito de “¡No a la mina, sí a la vida!”, más de cien personas comenzaron este sábado la concentración en la carretera N-620 a su paso por la localidad salmantina de La Fuente de San Esteban para protestar contra el proyecto de la mina de uranio que quiere llevar a cabo la empresa australiana Berkeley en el municipio salmantino de Retortillo.
Fuente: León Notiias
Dicho proyecto, que consiste en la apertura de una mina de uranio a cielo abierto, además de la construcción de una planta de tratamiento y almacenamiento de residuos radioactivos de primera categoría en los términos municipales de Retortillo y Villavieja de Yeltes, cuenta con un informe favorable sobre la Declaración de Impacto Ambiental por parte de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León.
Lo que pretenden tanto los participantes como los convocantes de la manifestación, según las palabras de su organizador y miembro de la plataforma STOP Uranio, Jesús Cruz, es que “la Consejería vuelva a hacer un estudio de impacto ambiental pero sobre el proyecto que había ocultado Berkeley y que ha sido descubierto por el Consejo de Seguridad Nuclear”, porque tal y como denuncian desde la plataforma “la evaluación favorable se dio sobre un proyecto en el que no figuraba que existirían residuos radioactivos, como así será”.
Para ello, STOP Uranio consiguió el apoyo de Equo-IU, Podemos, Ciudadanos, UPL y, según Cruz, “esperamos que del PSOE” para que el Parlamento regional apruebe una Proposición no de Ley con la que obliguen a la Junta a realizar un nuevo estudio. “No entendemos cómo se ha podido dar el visto bueno a un proyecto que dará 180 puestos de trabajo durante solo unos años pero que destruirá cientos de ellos y, sobre todo, la comarca por los próximos mil años debido a los residuos radioactivos”, explica Cruz.
Se calcula que el proyecto de mina de uranio que llevará a cabo Berkeley en Retortillo producirá más de dos millones de toneladas anuales del mineral, además de generar 41 millones de metros cúbicos de residuos al año y abarcará 110 hectáreas de terreno para la realización de cortas u hoyos de 120 metros para la obtención de uranio.
La manifestación, que además de cortar la N-620 a su paso por La Fuente de San Esteban también obstruyó la SA-315 y la SA-215, se desarrolló sin incidentes y siempre controlada por varias patrullas de la Guardia Civil. A la misma se fueron uniendo más personas procedentes de los municipios más cercanos, especialmente de Retortillo y Villavieja de Yeltes al ser las localidades afectadas, y contó con la participación a nivel particular del secretario regional de UGT, Agustín Prieto.