El menor crecimiento económico de China podría crear un superávit global en la oferta de cobre y mineral de hierro el próximo año, lo que golpearía a gigantes de la minería, que podrían sufrir además por una baja demanda de materias primas, conforme el gigante asiático reduce su gasto en infraestructura.
Fuente: Reuters
China es el mayor comprador mundial de cobre, aluminio, mineral de hierro, acero y carbón, además de ser el segundo mayor consumidor global de petróleo. Este voraz apetito ha alimentado un auge en los mercados de materias primas en la última década y ha creado una bonanza para muchos países y compañías que venden estos productos.
Sin embargo, tras casi una década de crecer a tasas anuales cercanas al 10 por ciento, la economía china se está desacelerando bajo el peso de una menor demanda interna y los problemas en sus principales socios comerciales, que son Estados Unidos y la Unión Europea.
Determinar la magnitud de la desaceleración es clave para las mineras y los productores, cuyos planes de expansión dependen de que China absorba su exceso de oferta.
Por cada punto porcentual que disminuye el crecimiento económico de China, el valor de su demanda por materias primas industriales cae en unos 10.000 millones de dólares, de acuerdo con cálculos de Reuters basados en la expansión del PIB y del consumo durante los últimos seis años.
Estos cálculos no tienen en cuenta cambios en los inventarios.
BHP Billiton, la mayor minera del mundo, y rivales como Rio Tinto ya están sintiendo el impacto de la baja en los precios del mineral de hierro debido a la menor demanda desde China. Los precios caerán más si la oferta supera a la demanda.
“Estamos esperando un exceso de oferta a partir del 2013 debido al menor incremento de la demanda en China y a más oferta desde los proveedores australianos por las enormes inversiones realizadas en los últimos dos años”, dijo el analista Jiro Iokibe de Daiwa Capital Markets.
Los precios referenciales del mineral de hierro rondaban los 128 dólares el jueves, su menor nivel desde noviembre del 2011 y un cuarto menos respecto de los niveles vistos hace un año, reflejando un recorte de los inventarios de ese mineral por parte de las siderúrgicas chinas.
No obstante, este precio es todavía cuatro veces superior al costo de producción de las mineras en Australia, que siguen gastando de forma agresiva para acumular capacidad.
“Las mineras globales todavía tienen que adaptarse a la sobrecapacidad y aún están vendiendo en China porque sacan ganancias en los actuales niveles”, dijo Helen Lau, analista de materias primas en la corredora UO B -Kay Hian.
Rio dijo esta semana que las ventas de su mineral de hierro fueron ligeramente menores a su producción en el trimestre a junio y que sigue planeando gastar 3.700 millones de dólares para expandir su capacidad en Australia en un 25 por ciento.
BHP registró un fuerte crecimiento en su producción de mineral en el trimestre terminado en junio y dijo que espera que su producción en Australia crezca un 5 por ciento en el año financiero 2013 pese a la menor demanda china.
El menor consumo en China también empujará a los mercados de cobre a experimentar un superávit el próximo año, mostró un sondeo de Reuters.
La mediana del sondeo apuntó a un estrecho superávit de 9.000 toneladas, que podría ampliarse si el crecimiento de China este año es menor al esperado.
China consume anualmente unas 7,6 millones de toneladas de cobre refinado y cada punto porcentual menos de crecimiento se traduce en 64.000 toneladas menos de demanda.
En un 7,6 por ciento, el crecimiento del PIB chino en el segundo trimestre fue el más débil en más de tres años y las perspectivas para el resto del ejercicio son inciertas. El Gobierno apunta a una tasa del 7,5 por ciento para todo el año.
“China ya no es el caballero blanco de las materias primas, al menos en el muy corto plazo”, dijo Vishnu Varathan, economista de Mizuho Corporate Bank.