Los cinco gigantes tecnológicos del mundo —Apple, Alphabet (propietaria de Google), Dell, Microsoft y Tesla— fueron demandados por presuntamente haber sacado provecho del uso del trabajo de menores en minas de la República Democrática del Congo, informó este 15 de diciembre un comunicado de International Rights Advocates.
Fuente: Tn8.tv
Según la demanda, las empresas “ayudaron e instigaron el uso cruel y brutal de niños pequeños” en las minas de aquel país para extraer cobalto, “el componente clave de todas las baterías de ion de litio recargables usadas en dispositivos electrónicos que estas compañías producen”.
La querella fue presentada por International Rights Advocates en representación de 14 familiares de menores que fallecieron o resultaron gravemente heridos en el trabajo en minas, así como de otros niños.
El documento detalló que los infantes trabajaban en minas que pertenecían a la firma Glencore.
Esta empresa vendía el cobalto extraído a la compañía Umicore, que, por su parte, lo suministraba a los mencionados gigantes de las tecnologías. Al mismo tiempo, un menor afectado señaló que trabajaba en una mina de la empresa Congo Dongfang Mining, que es una subsidiaria de la compañía china Zhejiang Huayou Cobalt.
“En vez de dar un paso adelante para ayudar a estos menores con una porción insignificante de su riqueza y vasto poder, estas compañías no hacen otra cosa que beneficiarse del cobalto barato extraído por niños a los que robaron su niñez, su salud y, para demasiados, sus vidas”, reza la publicación de International Rights Advocates.
En respuesta, desde Glencore precisaron en un comentario para The Guardian que “no toleran ninguna forma de trabajo infantil, forzado u obligatorio”.
La República Democrática del Congo es uno de los países más ricos en recursos naturales como uranio, cobalto, diamantes, coltán y oro. Más de la mitad de todo el cobalto del mundo se extrae en este país africano.
El cobalto es el componente fundamental de las baterías de ion de litio, que son las encargadas de alimentar los teléfonos móviles, coches eléctricos, computadoras portátiles y otros dispositivos modernos de los que se benefician millones de personas en todo el mundo.
A principios del 2016, el informe ‘This Is What We Die For’ (‘Es por esto que morimos’), de la ONG Amnistía Internacional y la organización Afterwatch, concluyó que tanto adultos como menores, algunos de ellos de tan solo siete años, trabajan en condiciones deplorables en áreas mineras artesanales de la República Democrática del Congo.
Los menores entrevistados dijeron que trabajaban hasta 12 horas al día en la mina, llevando pesadas cargas, para ganar entre uno y dos dólares diarios.
En el informe se denunciaba también que Apple, Sony y Samsung, líderes de la industria electrónica, probablemente utilizan piezas fabricadas mediante el uso de trabajo infantil.