de Catalina Huanca

Ante la incapacidad, negligencia e indolencia del gobierno, que permite a las empresas mineras contaminar sin ser sancionadas, ni prohíbe sus actividades cuando presentan riesgo de daño ecológico, la comunidad campesina de Raccaya exige la reubicación  en otro sitio del depósito de relave que obstruye la quebrada por donde pasa el río Raccaure, que recibió veneno del relave de esta mina. Indicaron que es un peligro mayor de contaminación por los huaycos y avenidas que se suscitan en esta zona, que rebalsan los depósitos y se vierten al río.

Juana Huancahuari, congresista por Ayacucho, ratificó el pedido señalando que desde el 2009 la población había cursado memoriales a más de diez entidades entre otras a Osinergmin, a los ministerios de Energía y Minas, de Salud y del Ambiente, solicitando que se pare la construcción del relave.

No contentos con envenenar el ambiente, para apropiarse de los terrenos de la comunidad y despistar a las autoridades, la minera denominó a la zona Pacuni cuando todos los comuneros la llaman Morcce, denunciaron.

 El memorial es claro en sostener que “esta construcción de relave no es aceptada por la comunidad campesina ya que se encuentra muy cerca a la comunidad y a los cultivos de la gran mayoría de comuneros”.

Catalina Huanca responde que cuenta con la Resolución Directoral N.° 238-2009-MEM7AAM que autoriza la obra.

Como se recuerda, el 27 de enero, un huayco arrasó con parte del relave Pacuni que se encuentra en el mismo cauce del río.

Cantidad de relaveras

La relavera Pacuni contenía los residuos sólidos de todas las demás relaveras que Catalina Huanca tiene en la comunidad de Raccaya.

Este hecho fue denunciado por los pobladores con fotografías anteriores a la catástrofe, en donde se aprecia a varias máquinas depositando los residuos de minerales en el cauce del río Raccaure.

En las otras relaveras, ubicadas en las colinas que dan al río Mishca, la minera recuperaba el agua y el material ya seco era llevado y compactado en la cuenca del Raccaure.

Los pobladores afirmaron que antes del fenómeno la relavera se encontraba completamente llena e incluso que sobresalía por encima del dique.

De otro lado, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) difundió algunas imágenes en donde se aprecia que se habría actuado con negligencia culposa al cerrar el paso a una quebrada por donde pasaba el río Raccaure.
Daños

El dique de relave de Catalina Huanca ha dañado al menos 200 metros de la carretera Canaria-Apongo-Asquipata, por efecto del desvío de las aguas del río, aislando a estos pueblos y perjudicando las actividades económicas de la zona.

Asimismo, se espera un adelanto del balance sobre el daño ecológico producido por la minera.