Comisión encabezada por el alcalde provincial de Arequipa, Alfredo Zegarra, viene a Lima a proponer al Ejecutivo una agenda de consenso que pasa por la revisión del nuevo estudio ambiental del proyecto. Los pobladores del valle del Tambo ratificaron que quieren que la minera -con un largo prontuario ambiental en el país y el extranjero- se retire de la zona para deponer su medida de fuerza. De lo contrario, las protestas seguirán. Y así sucedió.
Fuente: La Mula
El optimismo en el Gobierno por la ‘pausa’ de 60 días del proyecto Tía María en Arequipa anunciada por Southern Copper tras el mensaje a la Nación de Ollanta Humala contrasta con la realidad que se vive en la provincia de Islay, en donde la huelga indefinida por este tema ya lleva más de 50 días.
Es decir, todo hace indicar que la medida en cuestión no servirá para acabar con el conflicto social en esa región. En realidad, el proyecto Tía María ya está liquidado, al menos durante este gobierno.
Los pobladores del valle del Tambo ratificaron que quieren que la minera -con un largo prontuario ambiental en el país y el extranjero- se retire de la zona para deponer su medida de fuerza. De lo contrario, las protestas seguirán. Y así sucedió.
Ayer, apenas acabó el mensaje presidencial hubo enfrentamientos entre manifestantes y policías en Cocachacra, que terminó con un poblador, identificado como Evaristo Centi Saavedra (37), herido bala.
Hasta la publicación de esta nota, los accesos a ese distrito arequipeño permanecen bloqueados, sin que hasta el momento se registren nuevos enfrentamientos.
ALCALDES QUIEREN LA SUSPENSIÓN
Las autoridades de Arequipa representados por el alcalde provincial, Alfredo Zegarra, también marcaron distancia de la ‘pausa’ y acordaron solicitar al Gobierno nacional la suspensión indefinida del proyecto Tía María.
En su mensaje a la Nación, Humala alegó que su gobierno no puede decidir, unilateralmente, la suspensión del proyecto (que recién iniciaría operaciones en 2017) porque expondría al Estado a demandas legales internacionales que implicarían perjuicio económico para el país.
Además, los alcaldes arequipeños pedirán que el nuevo Estudio de Impacto Ambiental (EIA) del proyecto sea revisado por Unops o por un algún ente internacional independiente.
Este es un pedido entendible y al que el Gobierno no debería negarse si es que, como asegura, ese EIA subsana las más de 130 observaciones que hizo la Unosp al primer estudio.
Alfredo Zegarra sostuvo que, como mediador entre los alcaldes del valle del Tambo y el Ejecutivo, intentará que la población de la zona -cuya principal fuente de sustento es la agricultura- acepte la revisión del estudio como punto de partida para retomar el diálogo y acabar con el conflicto.
No será un camino fácil, porque la posición de los dirigentes de Islay y de la mayoría de la población de la provincia es unánime: exigen la cancelación del proyecto Tía María y el retiro de la minera de la zona para acabar con la huelga.
VIENEN A LIMA
Los miembros de la comisión encabezada por Zegarra e integrada por la gobernadora regional Yamila Osorio y los alcaldes distritales del valle, estarían viajando a Lima este lunes, para reunirse con representantes del Ejecutivo.
