Autoridades wixáricas (huicholes) de Jalisco, Durango y Nayarit denunciaron que el gobierno federal otorgó 22 concesiones a la minera canadiense First Majestic Silver, que se apoderó de 6.326 hectáreas en el desierto de Real de Catorce, San Luis Potosí, entre ellas lugares que consideran sagrados, por lo que rechazaron el proyecto de explotación. Este jueves emitirá el Congreso local un exhorto a la Secretaría de Economía para revocar la concesión otorgada a la minera canadiense en la zona sagrada de los huicholes o wixaritari según la denuncia presentada.

 

Fuente: diario La Jornada

10/11/2010. Julio Parra Parra, curandero del centro ceremonial de Kanpatehuala, municipio de Mezquitic, Jalisco, dijo que “”los manantiales sagrados donde recolectamos agua bendita”” se encuentran en las cuencas de las vetas de plata que serán explotadas y podrían secarse y quedar contaminadas con cianuro debido a la actividad minera.

“El acuífero, de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua, está sobrexplotado y su capacidad de recuperación es muy baja”, advirtió.

Tanto Julio Parra como Custo Santiago, de Santa Catarina Cuexcomatitlán, municipio de Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, advirtieron que se causarán daños irreversibles a 16 centros de población de seis ejidos que se encuentran en la superficie concesionada.

Custo Santiago pidió al municipio de Real de Catorce no entregar permisos de construcción o uso de suelo, y exigió al gobierno federal estrategias para el desarrollo armónico de la zona. Los pueblos wixárikas de San Sebastián, Teponahuaxtlán y San Andrés Cohamiata y de las comunidades de Santa Catarina Cuexcomatitlán, entre otros, sesionaron los días 3, 4 y 5 de septiembre, y con el aval del consejo de ancianos acordaron rechazar el proyecto minero.

También pidieron cancelar las 22 concesiones a la trasnacional e imponer “”una moratoria indefinida para que no se expidan permisos de explotación o exploración en el desierto de Real de Catorce ni en ningún lugar circunvecino a nuestros lugares sagrados””. Detallaron que la explotación minera pone en peligro las fuentes de agua de numerosas localidades del Bajío, entre ellas El Mastranto, San José de Milpitas, Estación Catorce, Las Relaciones, El Barranco, El Garabato, Vigas de Coronado y San Juan de Matanzas, donde viven aproximadamente 3 mil 500 personas.

Además, señalaron, el proyecto viola los derechos reconocidos en el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, así como el programa de manejo del área natural protegida de Wirikuta, que abarca casi 70 por ciento de la superficie, incluida en la concesión minera; también incumple la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos Peligrosos, la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente y la Ley Ambiental y de Consulta a Pueblos Indígenas de San Luis Potosí, así como numerosas normas oficiales.

Advirtieron que harán uso de todos los recursos jurídicos nacionales e internacionales y realizarán acciones de resistencia civil pacífica.

Ninguna riqueza vale más que el patrimonio cultural, sostienen

15/11/2010. Retomó Congreso de Jalisco petición de huicholes para frenar proyecto minero. El exhorto que el próximo jueves emitirá el Congreso local a la Secretaría de Economía (SE) para revocar la concesión otorgada a la minera canadiense First Majestic Silver en la zona sagrada de los huicholes o wixaritari se basa en la denuncia formulada en septiembre por grupos indígenas y ambientalistas, que proclamaron que el patrimonio cultural es más valioso que cualquier otra riqueza.

El jueves anterior, el diputado panista Gustavo Macías Zambrano promovió un punto de acuerdo para enviar el exhorto a la dependencia federal a fin de que analice el daño patrimonial que causaría la concesión minera y, tras avalarlo sin cortapisa, las fracciones representadas prevén que el pleno lo aprobará.

Esta decisión también pone en evidencia un proyecto carretero –al cual también se oponen los indígenas– para que la minera recién autorizada pudiera sacar su producción.

“El pueblo wixaritari conserva sus usos y costumbres desde hace miles de años, por lo que valoramos más la riqueza cultural que la material sin importar los beneficios económicos que se prometan, máxime si para obtenerlos es necesario destruir el patrimonio de sabiduría que representa la sierra de Catorce, lugar mágico donde nació el Sol.

Esperamos que el gobierno de México esté a la altura del conocimiento ancestral de sus pueblos y responda en consecuencia, indicaron los firmantes del documento, fechado el 18 de septiembre.

Para el pueblo wixárika es esencial preservar su tradición y los sitios sagrados, que son Wirikuta y la sierra de Catorce, morada de los dioses donde surgen los conocimientos ancestrales, por lo que el anuncio de la entrada del proyecto minero de la First Majestic Silver no sólo amenaza nuestra existencia y patrimonio histórico y ambiental, sino el equilibrio energético de la humanidad, añade el manifiesto que dio lugar a la intervención legislativa.

Según los wixaritari, otorgar los permisos de operación destruiría Wirikuta y causaría la contaminación de los ríos, el acuífero, la tierra, aire y especies endémicas y en peligro de extinción, como el águila real.

El manifiesto refiere que los lugares sagrados del pueblo wixárika son Tekata Hauxamanaka, en Cerro Gordo, municipio de Cuencamé, Durango; Tatei Haramara, en la isla del Rey, municipio de San Blas, Nayarit; Xapa Wiyeme, en la isla de los Alacranes, en Chapala, Jalisco, y Wirikuta, en Real de Catorce, San Luis Potosí.

El documento lo firman cuatro comunidades wixaritari junto con la Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto de Derecho Ambiental, el colectivo Universitarios Libres, asociaciones jaliscienses y potosinas, comunidades afectadas por la minería, ejidos indígenas y la actriz Ofelia Medina, entre otros activistas.