En la comunidad de Santa María Zoogochí, Ixtlán, Oaxaca, los días 24 y 25 de abril del año 2016, nos reunimos autoridades municipales y comunales, docentes y estudiantes de los diferentes niveles educativos de las comunidades con la finalidad de participar en el Foro regional “La minería en Oaxaca. Impactos sociales y ambientales”, en el cual analizamos información sobre las repercusiones sociales y ambientales que ha provocado la minería en Oaxaca y otros lugares, a partir de las cuales generamos, los posicionamientos, propuestas y acciones que emitimos en el presente PRONUNCIAMIENTO.
En la comunidad de Santa María Zoogochí, Ixtlán, Oaxaca, los días 24 y 25 de abril del año 2016, nos reunimos autoridades municipales y comunales, docentes y estudiantes de los diferentes niveles educativos de las comunidades de San Juan Tepanzacoalco, San Pedro Yaneri, Santa María Zoogochí, Santa Cruz Yagavila, Santiago Teotlasco, San Juan Yagila, Santa María Josaa, San Miguel Tiltepec y La Luz, pertenecientes a la Unión de Comunidades Cafetaleras del Rincón Alto de Ixtlán, así como autoridades de la comunidad de Tanetze de Zaragoza y Capulálpam de Méndez, con la finalidad de participar en el Foro regional “La minería en Oaxaca. Impactos sociales y ambientales”, en el cual analizamos información sobre las repercusiones sociales y ambientales que ha provocado la minería en Oaxaca y otros lugares, a partir de las cuales generamos, los posicionamientos, propuestas y acciones que emitimos en el presente
PRONUNCIAMIENTO: Nuestras comunidades no fueron informadas en ningún momento por ninguna institución del gobierno federal, que en el año 2010 se otorgaron las concesiones mineras El Roble y el Roble II, que abarcan 21,072 hectáreas, a la Compañía Minera Teocuitla, o Sundance, o First Mining Corporation, mismas que afectan nuestras tierras y territorios.
El gobierno federal, al otorgar de manera clandestina las concesiones antes mencionadas, ha violado nuestro derecho a la consulta y el consentimiento libre, previo e informado; máxime cuando a la fecha tenemos información de que se han realizado: muestras exploratorias a lo largo de 15 kilómetros, donde se ha encontrado material altamente magnético asociado con una mineralización de oro de alta calidad en venas; así como muestras “reconnaissance” con helicóptero (es decir de reconocimiento, “reconnaissance” es un término utilizado para operaciones militares)
Observamos que es práctica común de las empresas mineras despojar de sus tierras a las comunidades donde pretenden establecer sus proyectos, a partir de su privatización; para lo que cuentan con el apoyo de funcionarios públicos que implementan los programas Procede o Fanar.
Sabemos que las empresas mineras tienen como política, romper el tejido social de las comunidades donde pretenden establecerse o se han establecido, provocando: la confrontación entre familias y miembros de la comunidad, la desaparición de asambleas comunitarias u otros espacios para la toma de decisiones colectivas, la corrupción de autoridades comunitarias, municipales, estatales y federales, el establecimiento de grupos paramilitares o de otra naturaleza violenta que provocan intimidación entre los habitantes, así como el asesinato de defensores comunitarios.
Entendemos que a donde llega una empresa minera u otras que pretenden establecer megaproyectos en territorios indígenas o de otros pueblos, su primera acción es provocar el terror en la población como mecanismo para impedir la protesta.
Tenemos presente que el problema de la minería no será solo para esta generación, ya que las concesiones duran alrededor de 50 años y pueden prorrogarse. En ese sentido, hemos detectado que diversas instituciones públicas de los gobiernos federal y estatal e incluso algunas supuestas organizaciones no gubernamentales, pretenden capacitar u orientar a los jóvenes de nuestras comunidades con la intención de que en el futuro permitan la entrada a nuestros territorios de las empresas transnacionales.
Asimismo, tomando en cuenta que la explotación minera es una industria que causa distintos tipos de contaminación ambiental y daños graves a la salud humana, es importante que no nos dejemos ilusionar con sus promesas de regalías, generación de empleos, u obtención de dinero fácil; porque nosotros sabemos sobrevivir como nuestros antepasados.
Frente a esta situación de acoso y pretensión de despojo nos pronunciamos por:
El rechazo total a la minería, por todos los daños ambientales, sociales, culturales y a la salud humana que trae consigo esa industria; y en particular rechazamos la operación en nuestras tierras de las concesiones mineras El Roble y el Roble II.
El rechazo total a la privatización de nuestras tierras comunales, las cuales nos fueron heredadas por nuestros antepasados y son inalienables, imprescriptibles e inembargables. En este sentido hacemos un enérgico llamado de atención a la Procuraduría Agraria y otros funcionarios y dependencias que pretenden convencernos de privatizar nuestras tierras, para que no sigan acosando a nuestras comunidades con la intención de que acepten la certificación individual de parcelas y solares urbanos.
El rechazo a los programas de captura de carbono y otros programas que supuestamente defienden el medio ambiente y combaten el calentamiento global, ya que inducen a la privatización de los recursos de nuestras comunidades. zoogochi3En consecuencia, nos comprometemos a realizar las siguientes acciones en defensa de nuestro territorio:
Realizar asambleas comunitarias para proporcionar a las ciudadanas y ciudadanos información sobre lo expuesto en este foro, así como otras informaciones sobre el tema de minería (seguimiento de información sobre las concesiones mineras “El roble” y “El roble II”, experiencias de otras comunidades donde operan empresas mineras, análisis de las afectaciones que provoca la minería a la economía comunitaria, cultura, medio ambiente y salud humana), en cada una de las comunidades de la Unión de Comunidades Cafetaleras del Rincón Alto de Ixtlán, en las escuelas de los diferentes niveles educativos de nuestras comunidades, así como en el resto de comunidades que están incluidas en las concesiones mineras antes mencionadas, o que pueden resultar afectadas por su operación; con el apoyo de la UCC, la UNOSJO, S.C., el Colectivo Oaxaqueño en Defensa de los Territorios y otras organizaciones afines. Generar un proceso de organización que se oponga a la minería, concesiones de agua y otros bienes naturales y que al mismo tiempo nos permita el fortalecimiento de nuestra identidad cultural, en el que se involucren al menos, las demás comunidades zapotecas que pueden ser afectadas por las concesiones mineras antes mencionadas.
Establecer en los estatutos comunales de cada comunidad, la prohibición de la minería y otros proyectos que atenten contra nuestros territorios y formas de vida.
Construir alianzas con otras comunidades en la lucha contra la minería y por la defensa del territorio, cuidando que en los procesos de articulación, no interfieran intereses políticos partidarios. En este sentido, nos sumamos a la “Campaña Nacional por la Defensa de la Madre Tierra y el Territorio”.
Llevar el registro de todas las personas que visitan nuestras comunidades y de las actividades que pretenden realizar, en el entendido de que si no se comprende con claridad su propósito, tenemos el derecho de no permitir la realización de sus actividades mientras nos informamos al respecto y tomamos una decisión definitiva.
Concientizar a todos los grupos de trabajo y organizaciones que existen en nuestras comunidades (CEPCO, MICHIZA, etc.) para que no acepten, ni promuevan programas de gobierno que comprometan de alguna manera, nuestras tierras y bienes naturales comunes.
Sensibilizar a las comunidades del sector Tanetze que también resultan afectadas directamente por las concesiones antes mencionadas y a las comunidades que pueden ser afectadas indirectamente (Rincón Bajo), para que hagamos un frente común en defensa de nuestro territorio xidza.
Que la UCC realice reuniones constantes, con las autoridades de las comunidades, para evaluar los avances y dificultades que enfrentemos en relación con el tema de la minería y otros que pretendan la destrucción de nuestra cultura y medio ambiente y en consecuencia, se tomen los acuerdos necesarios para enfrentarlos.
Que los consejos de vigilancia de cada comunidad, con la colaboración de ciudadanos y comuneros, asuman la defensa de nuestro territorio y establezcan las medidas necesarias para impedir la realización de estudios u otras actividades que afecten o pretendan privatizar nuestros recursos naturales.
Que cada año se realice un evento cultural para fortalecer los saberes comunitarios y la lengua zapoteca Didza Xidza. Realizar la memoria de este foro, para registrar la información proporcionada y las propuestas generadas, al mismo tiempo que nos comprometemos a llevarlas a la práctica.
Realizar un próximo foro regional para dar seguimiento a las acciones hoy emprendidas.
Así mismo, las niñas, niños, jóvenes, profesoras y profesores de las distintas instituciones educativas participantes nos comprometemos a:
Construir un modelo de educación comunitaria donde se retome el cuidado del medio ambiente y el fortalecimiento de nuestra identidad cultural como Bëne Xidza.
Estudiar e investigar en nuestras escuelas acerca de los impactos económicos, sociales, culturales y ambientales que ha provocado la minería en nuestra región, nuestro estado, nuestro país y otros países, con la finalidad de que estemos debidamente informados.
Realizar campañas de información para generar la participación de nuestras comunidades en la toma de decisiones respecto de los problemas que ocasiona la minería, que incluyan las siguientes acciones:
Difusión de la información con los padres y madres de familia. Elaboración de materiales informativos a través de: programas de radio, carteles, periódicos murales, folletos, trípticos, frases, videos y redes sociales, entre otros.
Elaboración de obras artísticas como: murales, obras de teatro, poesías, dibujos y canciones, entre otras. Difusión de materiales producidos por otras comunidades u organizaciones, como: fotos, películas, documentales, páginas web, revistas y periódicos.
Santa María Zoogochí, Ixtlán, Oax., a 25 de abril de 2016.
Firman el presente pronunciamiento: AUTORIDADES MUNICIPALES Y AGRARIAS DE LAS COMUNIDADES: San Juan Tepanzacoalco, San Pedro Yaneri, Santa María Zoogochí, San Juan Yagila, Santa Cruz Yagavila, San Miguel Tiltepec, Santiago Teotlasco, Santa María Josaa, Tanetze de Zaragoza y Capulálpam de Méndez INSTITUCIONES EDUCATIVAS DE LA REGIÓN, PERTENECIENTES A LA DELEGACIÓN D-1-170: Escuela Primaria Bilingüe Cuauhtémoc, de Santa María La Luz, Escuela Primaria Indígena Renovación, de Santa María Zoogochí, Secundaria Comunitaria Indígena, de Santa María Zoogochí, Escuela Primaria Indígena Daniel Delgadillo, San Miguel Tiltepec, Escuela Telesecundaria, de San Miguel Tiltepec, Secundaria Técnica, de Santiago Teotlasco, Escuela Primaria Indígena Revolución, de Santiago Teotlasco, Escuela Telesecundaria, de Santiago Teotlasco, Escuela Primaria Indígena Resurgimiento, de San Juan Yagila, Secundaria Técnica, de San Juan Yagila, Instituto de Estudios de Bachillerato de Oaxaca, de San Juan Yagila, Escuela Primaria Bilingüe, de San Pedro Yaneri, Secundaria Comunitaria Indígena, de San Pedro Yaneri. Escuela Primaria, de San Juan Tepanzacoalco, Escuela Primaria Indígena Benito Juárez, de Santa Cruz Yagavila, Escuela Telesecundaria, de Santa Cruz Yagavila. ORGANIZACIONES REGIONALES Unión de comunidades cafetaleras “Unión y Progreso” (UCC), el Comité PROCAMINO del sector Rincón, la radio comunitaria Yaxhil “Didza Lübe”de San Juan Yagila, la Unión de Organizaciones de la Sierra Juárez, Oaxaca, Sociedad Civil (UNOSJO S.C.) y la organización de mujeres “Ngul Kuidi”.