Comuneros de Huehuetlán El Grande, en la Mixteca poblana, rechazaron la oferta de Minera Autlán de entregarles regalías por un millón de pesos mensuales (unos 75.000 dólares) a cambio del permiso para la explotación de una mina de manganeso que abarca 700 de las poco más de mil 300 hectáreas de terreno que les pertenecen y ratificaron su vocación ecológica y turística.
Fuente: Municipios Puebla
Además consideraron que la declaratoria de Área Natural Protegida de la Sierra de Tentzo, que comprende su comunidad, lleva escondida “malas intenciones”, pues “respeta las concesiones mineras otorgadas con anterioridad al decreto” del 29 de abril de 2011, dio a conocer el presidente del Núcleo Agrario de Bienes Comunales, Pedro Enrique Viveros Pérez, durante el Encuentro Nacional de Pueblos en Resistencia contra el Modelo Extractivo Minero realizado el fin de semana pasado en Zautla.
La determinación de rechazar una vez más las actividades de la minera fue tomada por unanimidad en una asamblea de los comuneros realizada en diciembre pasado debido a que en la década de los 80 del siglo pasado. “En ese entonces nos encontró desorganizados, se apoderaron de la mina y le pagaron al ayuntamiento, no a los comuneros, algunas regalías irrisorias”, añadió.
Luego, tras varios años de explotación y de uso de dinamita y explosivos, en los predios La Luz II, La Luz III y San José, concesionadas a la minera por 50 años prorrogables, se perdieron dos de los yacimientos de agua que los abastecen y la comunidad reaccionó, “por eso decidimos darle vocación turística y ecológica a nuestra comunidad”, mencionó.
En ese entonces se decidió expulsar a Autlán, “pero sólo hicieron una pausa, pues unos años después, en el 2009, regresaron a través de la transnacional Australian Minerals Group (AMG)” que intentó reanudar las operaciones mineras incluso con el apoyo de la Secretaría de Gobernación en la administración del ex gobernador Mario Marín Torres, dijo Viveros Pérez.
Y ahora, indicó, otra vez están ahí y aunque hay desinformación entre los pobladores de Huehuetlán El Grande, los comuneros han iniciado acciones de resistencia y están convencidos de que de nada les ha servido ser parte de un Área Natural Protegida, cuya declaratoria “dice que se deben respetar las concesiones mineras otorgadas con anterioridad”.
“Cuando se creó la ANP de la Sierra del Tentzo, todo se oía muy bien, todas parecían bondades, pero nos hemos dado cuenta que hay escondidas malas intenciones y sigue la desinformación, nunca nos consultaron para incluirnos y hay rumores de que hay un grupo de inversionistas europeos interesado en hacer un corredor turístico. Pero no lo sabemos con certeza y cuando nos demos cuenta, sólo vamos a ser sus barrenderos”, señaló.
Con estos antecedentes, dijo en entrevista posterior, los comuneros decidieron rechazar la oferta que les hizo la empresa Minera Autlán de pagarles un millón de pesos mensuales por extraer 10 mil toneladas de manganeso en el mismo periodo.
“A lo mejor a algunos nos tentó, pero en asamblea reafirmamos nuestra vocación ecológica y turística, y decidimos constituir una cooperativa y realizar otras actividades para sobrevivir y conservar los yacimientos de aguas termales que pueden ser dañados por la actividad minera”, explicó Viveros Pérez.