Las asociaciones civiles como: Tetela Hacia el Futuro, el Movimiento Independiente Obrero Campesino Urbano y Popular. Coordinadora Nacional Plan de Ayala, Movimiento Nacional, entre otras, anunciaron que en marzo llevarán a cabo varios eventos en contra de la industria minera.
Fuente: El Heraldo de Puebla
El representante de Tetela Hacia el Futuro, Germán Romero, dio a conocer que el próximo 7, 8, 9 de marzo, en Cuetzalan, se realizará la asamblea consecutiva que integrará el Frente Nacional contra la industria minera.
Unos días después habrá otro evento en Ahuacatlán y otro en Zautla, “el objetivo es la lucha contra las mineras, contra la industria minera, que es destructiva, devastadora”, resaltó, Romero.
Detalló que el 14, 15 y 16 de marzo, en Zautla se llevará a cabo el encuentro Resistencia Contra el Modelo Extractivo Minero; allí habrá talleres de: Estrategias para la defensa del territorio; impactos sociales y ambientales; acciones legales; y blindaje del territorio.
Según el Ecoportal, el Modelo Extractivo Minero no genera cadenas ni procesos económicos locales importantes para la gente. Transfiere enormes recursos y ganancias a las grandes corporaciones sin dejar casi nada, solo pobreza y grandes consecuencias sociales y ambientales. A esto se le llama economía de enclave.
La Industria Extractiva Minera se puede clasificar de muchas maneras. Por ejemplo en estos tres subsectores: minerales metálicos (hierro, cobre, cinc, etc.); minerales de construcción (piedra natural, arena, piedra caliza, tiza, etc.); minerales industriales (talco, feldespato, sal, potasa, azufre, etc.). Pero existen muchos modos de clasificar las Industrias donde se encuentra la minería. Se pueden clasificar según su sector económico, su tamaño, el origen de su capital, sus propietarios, su tecnología, su uso, etc.
El Modelo Extractivo Minero en las últimas décadas se ha expandido y se ha ido concentrando la riqueza de las corporaciones mineras. Entre 1990 y 1997, a nivel mundial las inversiones en exploración minera crecieron en 90%. Y en América Latina fue de 400% equivalente a una inversión acumulada de 17,300 millones de dólares, convirtiéndose en la principal región receptora de capitales mineros en todo el mundo; y representando el 30% del total de las inversiones mundiales.