Esta madrugada un grupo de pistoleros irrumpió en la casa del indígena nahua Gaudencio Mancilla, opositor a las mineras en el estado de Jalisco, llevándoselo junto a otras dos personas, quienes hasta el momento permanecen en calidad de desaparecidas. Desde hace un tiempo las mineras que saquean la región organizaron grupos de pistoleros que actúan contra la población que se resiste al saqueo. Foto: Gaudencio Mancilla participando en la Cátedra “Tata Juan Chávez Alonso” el sábado pasado.
Fuente: Centro de Medios Libres

 

Escucha la intervención de don Gaudencio Mancilla en la Cátedra “Tata Juan Chávez” del sábado pasado, donde cuenta el conflicto con las mineras

Gaudencio Mancilla acababa de regresar de la Cátedra “Tata Juan Chávez Alonso”, que se realizó este 17 y 18 de agosto en San Cristóbal de las Casas, a convocatoria del Congreso Nacional Indígena y del EZLN, apenas este 17 de agosto don Gaudencio llamaba en la Cátedra: “por eso le agradezco a todos los hermanos y hermanas del Congreso Nacional Indígena, que estemos atentos, ¿Porqué atentos? Porque que esto va a seguir, a la mejor la comunidad se va a atrever a parar a los mineros y no sabemos quién se vaya”.

Esta madrugada a bordo de 5 camionetas, un grupo de pistoleros sin identificar irrumpió en la casa de Gaudencio Mancilla Roblada ubicada en el ejido de La Guayaba. Gaudencio es líder del consejo de Mayores de la comunidad Nahua de Ayotitlán, ubicada en la Sierra de Manantlán, en municipio de Cuautitlán, Jalisco. Sacado a golpes, se encuentra desaparecido junto con su hermano Bonifacio Mancilla Roblada, y con Gerónimo Flores Elías, vecino de la comunidad de Tierras Negras. Las desapariciones ocurrieron a pesar de que don Gaudencio Mancilla ya contaba con medidas cautelares otorgadas por la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco (CEDHJ).

Apenas en octubre del 2012, Celedonio Monroy otro integrante del consejo mayor también fue privado de su libertad y hasta hoy sigue desaparecido. En Julio pasado, un comando de la misma manera irrumpió en su casa, en esa ocasión Gaudencio pudo escapar corriendo hacia la montaña, Don Gaudencio ha sido un fuerte opositor a la tala clandestina de árboles y a las mineras ilegales en su comunidad.

El Consorcio Minero Peña Colorada es una de las mineras que han emprendido agresiones contra las comunidades indígenas nahuas y otomíes de la región, impulsando un conflicto que abarca territorios en los estados de Jalisco y Colima. Un predio de 810 hectáreas concesionado a esta empresa es uno de los centros del conflicto. La explotación de dicho predio ha generado la contaminación y pérdida de los manantiales de la zona, así como el bloqueo de caminos. Diversas comunidades nahuas y otomíes de las inmediaciones de la zona han sido afectadas: El Mameyito, San Antonio, Changavilán, Las Maderas, Rancho Quemado, Los Potros, Puertecito de las Parotas y La Piedra, cuyas poblaciones han sido parcialmente desplazadas en los años recientes.

El compañero nahua Gaudencio Mancilla, venía de participar el fin de semana pasado en la Cátedra “Tata Juan Chávez Alonso” (convocada por el EZLN),y en la reorganización del Congreso Nacional Indígena, durante su participación el día sábado explicó la grave situación de su comunidad y mencionó el hostigamiento que han venido sufriendo.

“Mi nombre es Gaudencio Mancilla Roblada, soy el representante legal del consejo de mayores de la comunidad indígena de Ayotitlán, municipio de Cuautitlán Jalisco México. El consejo de mayores y la comunidad indígena de Ayotitlán ha venido sufriendo los despojos de sus tierras o de sus territorios, de sus ríos y aguas. Antes teníamos una empresa maderera, la comunidad los tuvo que sacar. Y entra, la empresa Peña Colorada, una minera que se está llevando el recurso sin autorización de la comunidad.

Ahora llega un pulguero de mineros, que ahora si están a la brava, , ahora con pistola en mano, quieren y están robando el material rocoso de las minas. ¿Qué están haciendo? ¿Qué están haciendo estas gentes? Están acabando con el agua, con los recursos naturales que es la madera, y con todo, y a la fuerza… compañeros. Entonces, ahorita la comunidad indígena de Ayotitlán está sufriendo mucho en esto, porque ahora si ya no podemos interponer amparos, ya no podemos parar las mineras.

Pero ahora ya cayeron a mi casa, y me dicen, no me alcanzaron, le dicen a la familia: Pos venimos a platicar con su marido, queremos trabajar las minas, las minas se van a trabajar, están dando mucho recurso y lo vamos a hacer. Pero el que trate de parar un camión o esas minas, nunca lo van a volver a ver.

Pero, por eso le agradezco a todos los hermanos y hermanas del Congreso Nacional Indígena, que estemos atentos, ¿Porqué atentos? Porque que esto va a seguir, a la mejor la comunidad se va a atrever a parar a los mineros y no sabemos quién se vaya. Pero si, yo agradezco a todos los hermanos del CNI, que somos parte y a todos los hermanos zapatistas.” (Fragmentos de la participación de Gaudencio Manilla del Consejo de mayores, comunidad Nahua de Ayotitlán, Jalisco en la Cátedra Caminante “Tata Juan Chávez Alonso” en el CIDECI-Unitierra en San Cristóbal de las Casas, Chiapas el 17 de agosto de 2013.)